La ruptura de la alianza política entre la pata del PJ que conduce el titular del Suterh Víctor Santa María y el ibarrismo, a través de la diputada Vilma Ibarra, llegó a la Legislatura porteña.

Es que con la estrepitosa caída del jefe de Gabinete Alberto Fernández, muchos comenzaron a pensar en un alejamiento progresivo del espacio político.

En este contexto, el bloque Frente para la Victoria que lidera Diego Kravetz (titular del Partido de la Victoria y espada albertista en la ciudad) no pasa sus mejores horas.

Los conflictos se sucedieron en esta semana a una gran velocidad. Primero fue el apoyo del bloque a la propuesta del macrismo para elegir autoridades comunales en 2009. Así los K boicotearon la sesión en la que se intentaba ratificar el llamado a elecciones para agosto de este año. Con la decisión tomada, alzaron su voz Sebastián Gramajo y Gabriela Cerruti.

Gramajo, quien trabajó arduamente en el tema Comunas (fue director del CGP 1) ya estaría pensando en su retirada, luego de que su padrino político, el secretario de Culto, Guillermo Olivieri, habría pasado a las filas que encabeza Daniel Scioli.

Por su lado, Cerruti también cuestionó la medida: reconoció que su “vehemencia” a la hora de defender su posición puede haberse traducido en malestar.

Asimismo, sostuvo: “Creo que tendríamos haber bajado al recinto a dar quórum para la sesión especial y haber reclamado a Macri que cumpla con las leyes y convoque a elecciones este año. Tendríamos que haber sostenido la posición que veníamos teniendo sobre este tema”, en declaraciones al portal Adn ciudad.

Además, Cerruti aclaró: “Considero que claramente nosotros debemos demostrar que somos el control del macrismo en la Ciudad y esa es una visión que comparto con muchos compañeros de bloque”.

Sin embargo, según pudo saber este medio, en el encuentro previo en el que se decidió no concurrir al reciento la ex funcionaria de Jorge Telerman no habría dicho nada sobre su posición crítica sobre su bloque.

De todas maneras, días después habría mantenido un fuerte cruce con Kravetz en el que habría amenazado con hacer un bloque propio.

El PJ, el objeto de la fuerte puja

El segundo conflicto al interior del bloque, y quizás mucho más determinante que las elecciones comunales, es el que refiere a la estrategia de alianzas y rupturas con la mira puesta en 2009.

En este marco, el cruce entre Santa María y Vilma Ibarra no pasa desapercibido. Es que por el Suterh además del mencionado Olmos, junto a él se encuentra Silvina Pedreira, allegada al gremio de porteros.

Por su lado, también forma parte del bloque Ivana Centanaro, quien responde a la diputada nacional, hermana del ex jefe de gobierno. “Ella es los ojos de Vilma, y ahora más que nunca”, confiesa un legislador de la bancada a este medio.

Pero no todo termina allí, algunos diputados miraron con mala cara a los diputados Cristian Asinelli y a Pablo Failde, quienes salieron a defender a Alberto Fernández en medio de la disputa por el PJ.

Asinelli, quien responde a Kelly Olmos, secretaria de Asuntos Municipales de la Jefatura de Gabinete, negó que la ausencia del jefe de ministros a una reunión del PJ se deba a que un sector haya pedido la renuncia.

Por su parte, Failde, quien viene del ARI, también quiso tener un gesto hacia el albertismo pejotista y expresó: “Algunos sectores del el PJ capitalino no saben distinguir entre una pequeña interna y un proyecto político nacional. La crítica a Alberto Fernández, uno de los principales funcionarios que intenta resolver satisfactoriamente el conflicto con el campo, además de inoportuna es de una lamentable miopía política”.

Reunión de bloque apolítica

A todo esto, hoy después del mediodía se realizó una nueva reunión del bloque kirchnerista. En ese cónclave no se habló de los temas espinosos, intentando disimular una tensión inherente al espacio.

“Hablamos de la sesión, temas del bloque sobre las leyes que andan dando vueltas para la sesión de mañana, pero de política partidaria y del PJ no dijimos nada”, confiesa ante este medio uno de los integrantes de la bancada que participó de la reunión.

Como sea, la idea, motorizada por Kravetz, fue “bajarle el tono” a la disputa con una suerte de tregua que logre apaciguar las aguas y que finalmente evite la ruptura en el bloque. Inclusive, el lunes por la noche (luego de volver de un viaje a Brasil), el titular de la bancada fue a comer con Olmos para anudar la relación con el bloque.

Claro que a esta tregua habrá que añadirle un condimento esencial: en la última reunión de bloque no estuvo Centanaro. Todo un símbolo.