Llegó el 8M, uno diferente, con un gobierno Nacional que pone en agenda a las mujeres visibilizando la histórica lucha de los movimientos feministas por la autonomía sobre nuestros cuerpos, marcando la génesis de un nuevo proyecto político de ampliación de derechos.

Sin embargo, en Jujuy este 8M va a contramano del Gobierno de Alberto y Cristina, en nuestra provincia es el Estado el principal ABUSADOR de las trabajadoras. El abuso de poder, la violencia de género y laboral están siendo denunciadas luego de un duro y profundo silencio que duró 4 años.

En lo que va del año, primero un Ministro, luego un Fiscal General y un Secretario y en estos últimos días un Juez, y no cualquier Juez, sino nada más y nada menos que el Presidente del Superior Tribunal de Justicia de la Provincia Pablo Baca, todos ellos han sido denunciados por acoso, violencia de género y laboral y abuso sexual contra mujeres.

¿No creen que en cualquier otro lugar este escándalo hubiera desencadenado en denuncias, repudios y renuncias por parte de quienes dicen ser servidores públicos y velar por los intereses de los desprotegidos? Tanto por los hechos aberrantes cometidos por funcionarios del poder ejecutivo, como por los del poder judicial.

Me duele profundamente como mujer esta realidad. Atemoriza la desprotección y más aún la vulneración de nuestros derechos por parte de quienes deberían proteger nuestras vidas. Un gobierno que no dudó en hacer campaña con las problemáticas de las mujeres, pero que muestra su verdadero rostro al ser cómplice de encubrir y sostener a sus funcionarios acusados, quienes se creen dueños de nuestro trabajo, de nuestra integridad y de nuestros cuerpos. Duele profundamente.

Es preocupante que frente a estas tremendas acusaciones, violenten aún más, intentando deslegitimar las denuncias de las mujeres con el relato de conspiraciones políticas tan descabelladas, que rozan lo bizarro.

Ya nadie les cree.

Queremos políticas públicas efectivas. Solo de esta manera podremos erradicar la violencia y transformar el sistema patriarcal que nos mata, quema y descuartiza todos los días y para esto tenemos que empezar por el Estado Provincial.

NO, NO ES CUALQUIER 8M. FRENTE A ESTOS HECHOS GRAVES DE VIOLENCIA INSTITUCIONALIZADA, NOS ENCONTRAMOS MÁS UNIDAS, MÁS FORTALECIDAS, MÁS ORGANIZADAS PARA DECIRLE NUNCA MÁS A UN ESTADO OPRESOR COMO PRINCIPAL ABUSADOR DE LAS MUJERES TRABAJADORAS.