El Banco Central y varias consultoras privadas coincidieron en que en el mes de julio la inflación siguió con su trayectoria descendente. A una semana de conocerse los datos del Indec, los números de las distintas consultoras se ubicaron entre el 2,2% y el 3,1% mensual. El mes pasado, la inflación oficial había cerrado al menos medio punto más arriba de lo estimado por las consultoras privadas.

El guarismo más alto lo dio a conocer esta semana el observatorio de la CGT, que estimó que la inflación el mes pasado estuvo en el orden del 3,1%, debajo del 3,4% que había calculado para junio. 

Para el conjunto de las consultoras privadas los relevamientos de precios arrojaron números menores. Por ejemplo, según el Estudio Orlando Ferreres la variación de precios de julio se ubicó en 2,4%, al igual que para la Fundación Fiel.

En tanto, para Agustín Monteverde el análisis preliminar de su estudio determinó un nivel de inflación para julio en  el orden del 2,3% mensual, en línea con los cálculos de  la consultora Ledesma, cuyas mediciones estimaron una variación de los precios entre 2,2 y 2,5 por ciento.

Por su parte, según el Relevamiento de Precios Minoristas (RPM) de Estudio Bein dio 1,8% frente al 2,4% del mes anterior, explicado fundamentalmente por los rubros equipamiento para el hogar (8,8%) y salud y esparcimiento (4,5%). "En el primer caso, impactó la paritaria de servicio doméstico (18% en julio retroactivo a junio). Por el lado de la salud, el 5% de las prepagas; y esparcimiento debido a la estacionalidad del turismo (subieron los precios de hoteles, paquetes turismo, cines, teatro)", explicó Santiago Mosquera a LPO.

Así, la inflación acumulada en los últimos doce meses cerró según el RPM en 45,3% y el acumulado en lo que va del año en 29,8%.

Todos los economistas consultados coincidieron en que se frenó el ritmo de decrecimiento de la inflación. En este sentido, esta semana el director del Indec, Jorge Todesca, reconoció que "será muy difícil" continuar con la baja de inflación especialmente en el rubro alimentos.

Particularmente sobre este tema, Mosquera detalló que "El dato para contrapesar es el del capítulo de alimentos y bebidas que dio 1%, una desaceleración muy fuerte respecto del 2,1% del mes pasado. Esto se debe a la caída en las ventas y el consumo fundamentalmente: los grandes supermercados parecerían tener menos margen para retocar los precios hacia arriba."

Como adelantó LPO, esta tendencia ya se observa en el repunte de la inflación de los precios de los bienes al por mayor, que no está siendo trasladada a los precios minoristas. Y también se observa en el ligero aumento de la inflación "núcleo", que es la que mide el Indec mediante el nuevo IPC Resto y que sirve para medir el comportamiento tendencial de los precios. En junio había repuntado al 3%, luego de un auspicioso 2,7% en mayo.

Además, esta inflación "núcleo" es uno de los números que sigue más de cerca el Banco Central a la hora de decidir las tasas de interés que paga por sus Letras (Lebacs). No obstante el leve repunte del mes pasado, este martes el Banco Central retomó la baja de las tasas  y hoy viernes en su Informe Monetario Mensual ratificó que " el proceso de desinflación sigue su curso”, aunque no aventuró un número para la inflación.

Por su parte, en el Gobierno también aseguraron que la suba de precios seguía desacelerándose. El vicejefe de Gabinete Mario Quintana  aseguró que la inflación en julio se ubicará por debajo del 2,5%. Y el ministro de Hacienda y Finanzas Públicas, Alfonso Prat-Gay, afirmó en Chile ante inversores que " julio va a estar sustancialmente por debajo del nivel de junio teniendo en cuenta estimaciones privadas".

"Creemos que para septiembre la inflación puede andar cerca del 2%, perfectamente en línea con lo planeado", anticipó Prat Gay.