Rogelio Frigerio recibió a LPO en el despacho por el que todos los días desfilan gobernadores e intendentes que le reclaman al Gobierno

El ministro del Interior ocupa una amplia oficina de la planta baja ubicada en el ala del patio de las palmeras de Casa Rosada, en la que se destaca un cuadro de Mauricio Macri con la banda presidencial.

El presidente lo eligió hace años para ser legislador, luego titular del Banco Ciudad y ahora para contener al peronismo, el desafío más grande de un gobierno que no pertenece a ninguno de los partidos tradicionales.

Sin dejar de mirar su Iphone, el economista se define como el ministro más político del gabinete, no teme quedar en la historia como parte de un gobierno de transición y niega que al resto de sus compañeros de gabinete les falte calle.

Está en tratamiento el proyecto de blanqueo y pago a jubilados y hoy se disparó una polémica porque incluye pena de prisión a los periodistas que revelen algún secreto de los comprendidos dentro del blanqueo. ¿Qué piensa de esto?

La verdad que puntualmente ese como todos los artículos de la ley está para debatir en el ámbito que corresponde que es el Congreso de la Nación. Se intentó desde el Poder Ejecutivo definir un proyecto que le dé la máxima confianza posible a aquellos que han mantenido sus ahorros afuera del sistema y que no han tributado todo este tiempo. 

"Creo que hay que revisar, pero toda la confianza que podamos trasladar a los argentinos que han estado fuera del sistema es positiva", afirma Frigerio sobre la inclusión de pena de prisión para los periodistas que revelen datos del blanqueo.

Ese sector de la sociedad, seguramente el que más ventajas ha tenido frente a los sectores más vulnerables, es al que le estamos pidiendo el esfuerzo para que financie una parte significativa de la deuda que tenemos con los jubilados. Por eso, queremos que este proyecto salga rápido y tenga éxito, y que tengamos muchos argentinos que vuelvan a apostar por el sistema, que vuelvan a apostar por el país y que paguen la penalidad que les exigimos y a partir de ahí todos los impuestos.

Pero suena contradictorio si uno piensa que Cristina derogó el delito de calumnias, como tipo penal y ustedes acaban de aprobar la ley de acceso a la información. Poner un delito de prisión a periodistas por revelar una información parece un retroceso.

A ver, lo que nosotros queremos es que el objetivo se cumpla y que tengamos los recursos para poder cumplir con nuestros jubilados y terminar con la estafa del Estado contra nuestros abuelos. En ese sentido, toda la confianza que podamos trasladar precisamente a estos argentinos que han estado afuera del sistema, es positiva. Yo creo que hay que revisar. Cuando nosotros planteamos un proyecto lo que hacemos es abrir el debate, sobre todos los puntos, y este es uno de los tantos puntos que se van a debatir.

LPOJuan Casas

¿Quiénes esperan que voten el blanqueo? ¿Con quiénes están hablando?

Con todos. Nosotros tenemos minoría en ambas cámaras, 90 diputados, 15 senadores. Así que obviamente tenemos que convencer con el diálogo y el debate a todos los que podamos de acompañar las propuestas del Ejecutivo y en eso estamos.

¿Tienen plazo previsto?

No, queremos aprobarlo lo antes posible porque entendemos que esto ha generado mucha expectativa en la sociedad y particularmente entre los jubilados. Pensemos que hay casi dos millones y medio de jubilados que van a empezar a cobrar cerca de un 45 por ciento más de lo que venían cobrando y que van a recibir en promedio unos 300 mil pesos por las deudas que tenía el Estado con ellos por esta estafa de tantos años. Así que es obvia y entendible esta expectativa. 

¿El plan económico es el blanqueo?

(Piensa) No, esto tiene el objetivo puesto en cumplir con un compromiso y cumplir con la ley. Por eso, todo el producido de estos ahorros que van a volver al sistema está destinado a pagarles a los jubilados.

Estamos trabajando desde el 10 de diciembre para regenerar la confianza necesaria para que vengan inversiones, creen empleo y en consecuencia podamos reducir la pobreza. No hay otro camino.

¿Tienen una expectativa importante respecto al efecto de reactivación que eso genere?

Sí, pero no único. Nosotros estamos trabajando desde el 10 de diciembre en regenerar la confianza necesaria para que vengan las inversiones, creen empleo y en consecuencia podamos reducir la pobreza. No hay otro camino. Esto es una parte más de muchas medidas y políticas públicas que hemos podido implementar hasta ahora en estos cinco meses de gestión. 

Es una más, como lo es el plan de infraestructura, el más ambicioso en nuestra historia. Como es la ley para Pymes, como es la ley de primer empleo, como es el esfuerzo que hacemos para convencer cada vez más a mayor cantidad de inversores que la Argentina es un lugar para apostar los ahorros locales y los ahorros externos que se traduzcan en inversión.

Entre los inversores hay cierta expectativa respecto del gobierno de Macri pero también prudencia cuando se mira la evolución de los números fríos de la economía: déficit, inflación, crecimiento, variables que hoy no son alentadoras...

Sí, sabemos que hay mucha expectativa puesta en que podamos empezar a domar el problema tan grave que es para tantos millones de argentinos haber convivido durante tanto tiempo con una de las inflaciones más altas del mundo. Estamos hablando de casi una década en la cual la inflación le ha comido, le ha erosionado el salario a muchos millones de argentinos. Y que además ha generado trabas y restricciones a la inversión. 

Por eso, es que estamos decididos a superar este problema, por supuesto en el tiempo: Hacerlo de un día para el otro obligaría a un ajuste salvaje que no estamos dispuestos a hacer. Pero en esta segunda parte del año ya la inflación la vamos a encauzar en alrededor del 2 por ciento mensual y quizás a fin de año aún por debajo de estos niveles. Y vamos a terminar nuestro mandato en 2019 con una inflación en línea con la mayoría de los países de la región, que no han tenido este problema por el cual ha atravesado la Argentina en la última década.

¿Y qué le contesta a los economistas, que son varios, que dicen que tienen un riesgo alto de quedarse a mitad de camino? Por ejemplo en el ajuste en las tarifas, dieron el tarifazo y después retrocedieron y no termina de salir la revisión integral, entonces la empresa dice que no invierte.

LPOJuan Casas

La revisión integral de tarifas la vamos a hacer, es necesaria para avanzar en otras cosas. Nosotros siempre hemos dicho que vamos a trabajar gradualmente en resolver los problemas de tantos años. En este caso, tarifas que han estado congeladas durante 12 años mientras la mayoría de los precios de la economía crecían más del 700 por ciento. Aún hoy, con este esfuerzo que hace la sociedad pagando tarifas más altas de electricidad, gas y agua, seguimos cubriendo como Estado una parte enorme del costo de la producción de estos servicios. 

En el caso de la energía eléctrica, antes del cambio de tarifas se cubría solamente el 8 por ciento del costo. Hoy una vez cambiado el régimen tarifario estamos cubriendo alrededor del 30 por ciento. El Estado sigue subsidiando alrededor del 70 por ciento de las tarifas de energía eléctrica y probablemente durante un tiempo largo vamos a tener que sostener estos subsidios. Porque estos problemas que se han ido generando durante más de 10 años no se pueden resolver en 5 meses.

Las diferencias en el gabinete 

¿Usted es el bombero del Gobierno? Cada vez que hay un problema, como ahora con las tarifas en donde Aranguren aplicó el Excel y explotaron los gobernadores e intendentes, tuvo que aparecer.

Yo soy el ministro político y el ministro que está más en contacto con quienes están en la primera trinchera de la sociedad, los intendentes, los gobernadores y en consecuencia quizás manejo más información respecto de lo que pasa realmente en el territorio y esa información la vuelco en el equipo, en el gabinete. Me parece que pasa por ahí. Nosotros trabajamos como un equipo en donde cada uno aporta lo suyo.

No soy el bombero del Gobierno, pero soy el ministro político que está en contacto con los que están en la trinchera de la sociedad, intendentes y gobernadores. Por eso, manejo más información de lo que pasa en el territorio.

¿Dice que le falta calle a otros ministros?

No, no. Cada uno por las tareas que encara tiene distintas características. En mi caso estoy obligado a tener mucha vinculación con lo que ocurre en el territorio. De hecho gran parte de la semana me la paso viajando por el interior. Esa experiencia yo la vuelco en el gabinete y esto en general puede ayudar a tomar mejores decisiones en las políticas públicas. No somos infalibles, si nos equivocamos lo reconocemos y lo rectificamos y eso es lo que pasó, nada más.

El Gobierno dice mucho eso y ocurre en la realidad. Ahora, a veces uno se pregunta “¿Por qué no lo pensaron antes?”. Porque largan el tarifazo y chocan y retroceden.

Creo que no hubo un Gobierno en la historia contemporánea que haya tomado tantas decisiones de políticas públicas en 5 meses como hizo este Gobierno. Y en consecuencia la probabilidad de equivocarte en alguna es más alta. Generalmente el que hace se equivoca. Lo importante es equivocarse la menor cantidad de veces posible, creo que hemos rectificado un par de políticas de las centenares que hemos implementado estos meses. Y reconocer un error y corregirlo no creemos que vaya en contra de nuestra fortaleza política sino por el contrario, y ahí claramente nos diferenciamos del gobierno anterior, que cuando se equivocaba –muchas veces, lamentablemente-, en general redoblaba la apuesta porque entendía que corregir la política era síntoma de debilidad. 

LPOJuan Casas

Hay todo un debate sobre cuál es la posición del Gobierno en torno a Cristina. Cuando hizo el acto en Tribunales los criticaron mucho a ustedes por qué lo permitieron. Políticamente, ¿qué le conviene más al Gobierno? ¿Una Cristina viva políticamente porque divide al peronismo o como exigen algunos sectores una Cristina presa?

(Sonríe) Yo creo que más allá de la conveniencia tenemos que acostumbrarnos a convivir con un Gobierno que se ocupa de las cosas de las que constitucionalmente se tiene que ocupar, de las cosas que una república demanda. A veces nos critican porque no tenemos injerencia en la Justicia, cuando nosotros estamos orgullosos de no tener injerencia en otro poder de la República. 

También nos critican porque no impedimos alguna demostración de otra fuerza como ocurrió con el regreso a la vida pública de la ex presidenta. Y nosotros entendemos que hay un sector de la sociedad, minoritario ahora, que sigue apoyando al kirchnerismo y nos parece normal y saludable para una democracia que se puedan manifestar. Entendemos que no tenemos que tener injerencia en esas cosas y que nos tenemos que ocupar de los problemas concretos y orientar nuestra energía a eso. A impulsar el plan de obras públicas, a reformular el vínculo que tenemos con los gobernadores y los intendentes, a mejorar en general las instituciones del país. Y básicamente a generar políticas públicas orientadas a disminuir la pobreza, que es nuestro principal objetivo.

Tenemos que acostumbrarnos a convivir con un Gobierno que se ocupa de las cosas que fija la Constitución. Nos critican por la poca injerencia en la Justicia, cuando nosotros estamos orgullosos de eso.

Pero el año que viene hay elecciones y visto desde afuera da la impresión de que a ustedes les conviene más un peronismo dividido, por lo menos en la provincia de Buenos Aires, que unificado. Porque si está dividido tienen más chances de salir primeros y hoy Cristina aparece como un factor de división del peronismo.

Es un análisis de un periodista, un observador político. Puede ser que sea así, pero es algo que se da no por voluntad nuestra.

Usted dice que el Gobierno no opera sobre eso, que no lo llaman a Bossio y le dicen “ármate un bloque que te vamos a respaldar”…

Claramente el peronismo está haciendo el duelo y la necesaria autocrítica después de una derrota electoral importante. Eso puede llevar un tiempo y eso también puede generar que haya distintas variantes electorales de ese peronismo.

¿Cómo está el Gobierno con Massa?

Bien, en diálogo permanente en el ámbito que corresponde que es el Congreso de la Nación.

Hubo chisporroteo con Massa. Que es muy “ventajero” le dijo el presidente.

Pero creo que tenemos una relación madura, que se vio en la mayoría de los tratamientos de las leyes más importantes que se debatieron en el Congreso y que creo que va a continuar con este paquete de leyes que tienen que ver con honrar la deuda con los jubilados.

Él va a apoyar el proyecto…

Bueno, lo dijo públicamente.

LPOJuan Casas

¿Cómo es ser ministro político de un gobierno no peronista, con toda esta mitología popular de que los presidentes no peronistas nunca terminaron su mandato, un hecho real por lo menos desde el regreso democrático?

Creo que hay un cambio de paradigma y que tenemos que adaptarnos todos a un cambio muy profundo en la forma de hacer política y es la primera vez en muchísimas décadas que hay un presidente que no proviene de ninguno de los dos partidos mayoritarios y eso me parece que no es un hecho menor. Es representativo de los cambios que se están viviendo en la política en nuestro país y que también se replican en otras partes del mundo. Tienen que ver con los cambios en la forma en que nos comunicamos. Y también tienen que ver, con un cambio generacional donde hoy hay muchos protagonistas de la vida política en Argentina que han nacido y se han criado en democracia. 

Veo sobre todo en los peronistas con responsabilidades de gobierno, mucha prudencia y una comprensión de que hay que generar también gobernabilidad para el Presidente.

O sea que ve un peronismo más respetuoso de las instituciones...

Yo veo que hay una madurez muy importante de la mayoría de la clase dirigente argentina y por supuesto en el peronismo, donde veo mucha prudencia y donde veo la necesidad que sienten sobre todo aquellos que tienen responsabilidad de gobierno, en generar también gobernabilidad para el Presidente de la Nación.

Hablaba de lo difícil que es revertir políticas desacertadas de 12 años y el tiempo que esto lleva.¿No teme que en este proceso ustedes queden como un gobierno de transición, de un régimen más populista a uno más vinculado a la modernidad? O sea, que paguen todos los costos, ordenen y pierdan las elecciones.

Si ese es el rol que tenemos en la historia, lo tendremos que asumir. Yo creo que es muy importante que la Argentina deje atrás las políticas populistas y las políticas que han impedido el desarrollo nacional y que han generado tanta pobreza y tanta indigencia en nuestro país. Y la verdad es que pensamos mucho más en generar cambios, en generar la plataforma para poder emprender políticas de desarrollo económico y social que en permanecer en el poder.

¿Es verdad esto que se comenta mucho de que Macri sólo quiere hacer un mandato? ¿Lo escuchó a él decir eso?

La verdad que no hablamos de ese tema. Sí lo he escuchado muchas veces decir: “A mí la gente me eligió para hacer las cosas bien, para corregir los problemas que hay que corregir y no para quedar bien, para adoptar políticas demagógicas”. “Yo voy a decir la verdad y voy a hacer lo que considere necesario para poner a la Argentina de pie”, eso se lo escuche decir muchas veces.

¿Quiere ser presidente?

De River.