El Gobierno seguirá demorando la ratificación del decreto que subió el mínimo imponible de Ganancias y no conformó a ningún sector de la oposición: a último momento, decidió no tratarlo mañana en la sesión de Diputados, convocada para validar los decretos presidenciales del verano.

Cambiemos no logró imponerse cuando trató el DNU de Ganancias en Comisión, porque Sergio Massa mandó a su representante (el diputado Raúl Pérez) a abstenerse.

El kirchnerismo aprovechó la tajada, logró dictamen de mayoría con 8 firmas y por lo tanto el derecho a que se trate primero, con la certeza de poder imponerlo.

Un DNU recién se invalida cuando las dos Cámaras los deciden y en el Senado, se sabe, el peronismo manda. Por un vacío reglamentario, mientras no se anule un Gobierno puede aplicarlo aunque no por eso deja de estar a tiro de tener que dar marcha atrás si el Congreso lo decide. 

La única esperanza de Cambiemos era convencer a diputados del bloque de Diego Bossio, pero no lo lograron. Y no ratificarlo en la Cámara baja puede ser fatal, porque en el senado se sabe que manda el peronismo.

“Lo que hicieron fue una torpeza. Si no podían sacar un dictamen de mayoría, no lo deberían haber tratado en comisión. Ahora quedaron condicionados”, explicaban los más experimentados en Diputados.

Como explicó LPO, el viernes el plan de Cambiemos era tratar primero el dictamen del oficialismo aunque sea de minoría, una maniobra al filo del reglamento.

Esperaban un acuerdo con Massa, a quien el fin de semana el oficialismo le cedió nada menos que una de las tres vacantes de la Auditoría General de la Nación (AGN).

Massa sí ratificará otros decretos de Macri repudiados por el kirchnerismo, como el que elimina la ley de medios y el Afsca y crea la Enacom; o la ley de ministerios que permitió ese y otros cambios en el organigrama.

A cambio, el tigrense logrará un proyecto de resolución que le pide a Macri apurar una ley para crear un marco jurídico más amplio al funcionamiento de la Enacom.

Otro DNU que seguirá pendiente de validación es el que elimina el 15% de coparticipación a las provincias, dispuesta por Cristina Kirchner poco antes de irse, en respuesta a un fallo de la Corte que había dispuesto reintegrar ese porcentaje a San Luis, Córdoba y Santa Fe.

En ese caso, Massa sí apoyó en Comisión a cambio un sistema de reintegro prorrateado y por lo tanto Cambiemos no debería tener problemas en validarlo en el recinto. Pero prefiere no arriesgarse. Tal vez no sea momento.