Las cartas parecen estar echadas. El oficialismo tiene la palabra de un grupo de diputados del Frente para la Victoria que votarán un endeudamiento de unos 60.000 millones, el punto más conflictivo del presupuesto que envió María Eugenia Vidal a la Legislatura bonaerense.

Por estas horas, cuando el inicio de la sesión parece inminente, la postura de ese grupo de diputados kichneristas parece inamovible.

“Hay un sector que está decidido a votar y parece que no hay vuelta atrás”, le dijo a LPO un diputado que se encuentra con el grupo de La Cámpora, comandado por José Ottavis, y que resiste ese endeudamiento millonario.

El líder camporista parece abocado ahora a evitar que el bloque del Frente para la Victoria estalle por los aires. Ottavis tiene poco más de un mes como presidente de una bancada de 36 legisladores y mostró grandes dificultades para contener ese grupo.

La posibilidad de un quiebre existe, pero nadie en ese bloque -tampoco los intendentes- quiere eso. El desafío de Ottavis será contenerlo y resistir a la compleja situación de que un grupo vote el presupuesto y el otro no. “Aunque votemos así, el bloque no tendría por qué romperse”, asegura un diputado ultra k.

El diputado Ricardo Moccero y los intendentes Juan Pablo De Jesús y Eduardo Bucca.

Aglaplata

Mientras tanto, los intendentes siguen llegando a la Legislatura. Su presencia allí es un mensaje a la totalidad del bloque y una fuerte presión para que el presupuesto se apruebe. Se lo vio a Mariano Cascallares (Almirante Brown), Patricio Mussi (Berazategui), Hugo Corvatta (Saavedra), Eduardo Bucca (Bolívar), Alberto Descalzo (Ituzaingó), Juan Pablo De Jesús (Partido de la Costa). Incluso algunos alcaldes que no venían participando de las reuniones con el Ejecutivo como Gustavo Arrieta (Cañuelas) y Jorge Ferraresi (Avellaneda).

LPO adelantó anoche que la clave del acuerdo es justamente que una parte de los 10.000 millones del endeudamiento que se girará a los municipios (unos 3.000 millones) será de libre disponibilidad. Es decir que los alcaldes serán quienes decidan en qué gastarlos.