El escándalo por los contratos de Fernando Niemrbo con el gobierno porteño desempolvó los jugosos contratos que cerró el ex legislador macrista Avelino Tamargo con la Ciudad.

El canal C5N informó hoy una serie de negocios, que ya había revelado LPO, sobre Tamargo, dedicado en los últimos años a la organización de eventos culturales y deportivos con fondos de la Ciudad.

A comienzos de siglo, Avelino era una promesa de la política. Mano derecha de Gustavo Béliz, terminó en las huestes del PRO.

Tamargo es conocido en el PRO, entre otras cosas, por su perseverancia cuasi budista, que acaso le haya impreso su pasión por las prácticas de Ravi Shankar, a quien trajo a la Argentina en 2012.

“Avelino es el símbolo de la perseverancia por sobre la inteligencia”, lo definen al ex legislador en el PRO y recordaron que llegó a una banca en el parlamento porteño por su insistente presencia en la sede que tuvo la campaña de Macri por la jefatura en 2007.

“Llegaba primero y se iba último, pero como no tenía nada para hacer, se quedaba en los pasillos y Mauricio lo veía todos los días al pasar; le cayó bien y lo hizo entrar en la lista”, explicaron en el PRO.

Desde entonces, Tamargo maneja la empresa Sinergya, en la que supo ser socio de Marcelo Figoli y Diego Finkelstein del Fenix Entertainment Group, que dejaron de participar de la empresa hace dos años.

Cuando quedó afuera de la Legislatura en 2011, Tamargo recibió como consuelo la promesa de Macri de que podría organizar tres shows por año en el teatro Colón.

Para eso, Tamargo puso a rodar la productora Sinergya, en la que a diferencia de Niembro, que figuraba en "La Usina" como el único responsable sin empleados, Avelino tendría tres empleados. 

Con la excusa de “abrir el Colón a la sociedad”, Tamargo promovió los shows de “Los Elegidos”, que le permitió actuar en el Colón a artistas populares como el Chaqueño Palavecino, Valeria Lynch, Patricia Sosa, Palito Ortega y Marilina Ross, entre otros. La estrella del show fue la cantante de cumbia Karina "La Princesita".

Tamargo fue, además, quien almorzó con Jorge Messi, padre de la estrella mundial de fútbol, con el objetivo de convencer a “Lío” para que acordara ser el embajador de la Ciudad de Buenos Aires en los Juegos Olímpicos de la Juventud, que se realizarán en 2018 en Villa Soldati.

La última aventura de Avelino se produjo en junio de este año, cuando cerró un contrato por el que reciboó 500 mil pesos a través de una polémica contratación directa para homenajear al cómico Alberto Olmedo.