Horacio Rodríguez Larreta se refirió a las elecciones del domingo pasado y dijo estar "preocupado" por la reacción del gobierno de Alberto Fernández, que salió a celebrar la derrota, porque dijo que eso supone que no habrá un cambio de rumbo.

"Hay que mirar los datos y la evidencia. Así como aplica para la salud, también aplica para la elección. El dato es contundente: nosotros ganamos y ellos perdieron. No tiene mucha más interpretación", afirmó el jefe de gobierno porteño durante una conferencia de prensa.

"Los números son los números: ganamos por más de 8 puntos, ganamos en la provincia de Buenos Aires, ganamos en Capital por más de 20 puntos, ganamos en 13 provincias, ganamos los 5 senadores para que no tengan quórum automático, estamos parejos en Diputados", desarrolló Larreta.

El dirigente del PRO dijo que más allá de las chicanas le preocupa la actitud de la Casa Rosada porque implica que no habrá un giro en la gestión. "Uno hubiera esperado que el Gobierno escuche el resultado de la elección, que fue una derrota para ellos. Cuando salen a festejar, a decir que ganaron, me preocupa muchísimo porque supone que no lo entendieron o que lo entendieron y nos mienten", indicó.

El Frente de Todos hizo la tercera peor elección del peronismo desde el regreso de la democracia

"O que no van a hacer alguna corrección, que es lo que la gente les pidió. La gente les pidió que cambien el rumbo. Lo primero que tienen que hacer es aceptar la derrota para cambiar el rumbo. Por eso me preocupa la reacción del Gobierno", insistió Larreta

El jefe de gobierno negó además que haya un llamado al diálogo por parte del gobierno y dijo que nadie del oficialismo se comunicó con él. "Los proyectos hay que verlos, hasta ahora fueron comentarios del presidente. Toda discusión se va a dar en el Congreso que es donde corresponde", respondió y también negó que haya "una transición" como dijo Mauricio Macri.

Finalmente, Larreta chicaneó al peronismo por la marcha que realizará este miércoles con motivo del día de la militancia, pero que según Alberto será para festejar el "triunfo". "Me suena muy extraño que vayan a festejar una derrota, porque de que fue una derrota no tengo ninguna duda, nadie lo puede discutir", ironizó.

"Me preocupa mucho porque festejar la derrota supone no reconocerla y no reconocerla supone que no van a cambiar. La gente les pidió a los gritos, o a los votos, que cambien, que cambien el rumbo. Que se ocupen de la inseguridad, que basta de escuelas cerradas, que trabajemos en un plan para bajar la inflación, para crecer, para generar empleo. Ahora si no asumen que perdieron, la preocupación que uno tiene es que no van a cambiar. Uno tiende a pensar que no lo van a cambiar. Esa es la gran preocupación, que no cambien", completó.