Sale AgustÃn Rossi, entra Jorge Taiana y Cristina Kirchner se queda con el Ministerio de Defensa. Alexis Guerrera sustituye al fallecido Mario Meoni y Sergio Massa sigue como referente en Transporte. Juan Zabaleta releva a Daniel Arroyo en Desarrollo Social y Alberto continúa como único jefe polÃtico de la cartera.
Con esa dinámica, que en la Casa Rosada ya la bautizaron como "sistema de cupos", el presidente diseña los posibles cambios de Gabinete para diciembre. La única certeza, repiten, es que Cristina, Massa y Alberto mantendrán los ravioles del organigrama que obtuvieron en 2019, tras una rosca feroz en la que cada accionista del Frente de Todos peleó por todo y consiguió una parte.
Taiana reemplaza a Rossi en Defensa y Cristina suma otro ministerio
La dinámica del cierre de listas no fue muy diferente, aunque con tensiones y un final algo caótico. Máximo Kirchner y Massa pidieron que en la provincia de Buenos Aires encabezara Santiago Cafiero y hasta especulaban con un mega ministerio que concentrara todas las áreas económicas y le hiciera sombra a quien lo suceda como jefe de Gabinete.
Alberto resistió la presión con una contrapropuesta: que también integraran la nómina la titular de Aysa Malena Galmarini, esposa de Massa, y el ministro del Interior Eduardo "Wado" De Pedro. Sus socios no aceptaron, logró que Victoria Tolosa Paz encabece la lista, pero poco pudo hacer con el resto de lo casilleros y le pasó lejos la lapicera que definió los candidatos de la Legislatura bonaerense.
Y hasta tuvo que intervenir para que Arroyo integrara la boleta de Tolosa Paz y pueda retornar al Congreso en diciembre. Era resistido por el kirchnerismo, que seguirá con algunos resortes claves del Ministerio, como la secretarÃa de Inclusión Social, a cargo de Laura Alonso. No fue fácil y el ministro terminó en un humillante puesto doce de la lista.
Zabaleta y el ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, sacaron chapa de operadores de Alberto, a quienes conocieron en la campaña de Florencio Randazzo de 2017. El ministro, además, mantiene una tensión abierta con la Cámpora en Hurlingham, de donde proviene Daniel Selci, su sucesor en la intendencia. No descarta enfrenarlo en 2023.
La principal certeza de estos desencuentros, creen en la Rosada, es que el Frente de Todos puede seguir siendo gobierno sólo si sus referentes se mantienen unidos y por lo tanto las discusiones seguirán, pero la sangre nunca llegará al rÃo.
La tensión por el recambio de gabinete irá subiendo y después de las elecciones monopolizará la agenda por varios dÃas. Al ministro que ven con un pie afuera es a Luis Basterra, de Agricultura, que no mostró capacidad de encauzar el vÃnculo con el sector. Hay presión para desplazar a MatÃas Lammens, de Turismo y Deportes, a quien por ahora Alberto sostiene. Si lo cambia, es por uno propio, pero la temporada récord que se espera para el verano le juega a favor al ex presidente de San Lorenzo.
El presidente tiene decidido retener al ministro de Hacienda MartÃn Guzmán, pese a las presiones por desplazarlo. Máximo no oculta su rechazo a un acuerdo inminente con el FMI y amenaza con no aprobarlo en el Congreso si no le gusta la letra fina.
Otro resistido en el kirchnerismo es MatÃas Kulfas, ministro de desarrollo productivo, a quien nunca le perdonaron su libro crÃtico de la gestión económica de Cristina Kirchner, poco antes de conocerse la candidatura de Alberto y ser tentado para sumarse a su gabinete. Por ahora está consolidado. "Con el rebote de la postpandemia, es una máquina de dar buenas noticias", lo protegen en la Rosada.
Y aclaran que en esta cartera también funcionará la ley de cupos: si Kulfas tambalea también podrÃa peligrar el futuro de Paula Español, secretaria de Comercio Interior y en los papeles a cargo de controlar que no suban los precios. La inflación está fuera de control y si los resultados electorales no son los esperados, podrÃa ser una de las apuntadas.
Otra sorpresa de fin de año podrÃa ser el retorno de AgustÃn Rossi al gabinete, si es que no gana la interna de Santa Fe en septiembre y se queda sin un lugar en el Senado. Después de pedir su renuncia, el presidente lo despidió con una larga charla de una hora, en la que terminaron en un "hasta luego". ¿Su futuro es agricultura? Nadie lo descarta.
Otro nombre que circula como relevo albertista es Julián DomÃnguez, ex presidente de la Cámara de Diputados y ministro de Agricultura durante el último gobierno de Cristina Kirchner. Tras su fallido intento por ser candidato a gobernador en 2015, cuando cayó en una interna con AnÃbal Fernández y La Cámpora, se fue a trabajar a Smata, el gremio de Ricado Pignanelli, uno de los sindicalistas de estrecha relación con el Gobierno.
El presidente cuida como propia a la ministra de Seguridad Sabina Frederic y resiste los ataques al de Trabajo Claudio Moroni. Tiene expectativas electorales moderadas, pero con un objetivo en la mira: ganar en la provincia de Buenos Buenos Aires, aunque sea por un voto, para celebrar la primera victoria legislativa de un gobierno peronista desde 2005, cuando Cristina doblegó a Chiche Duhalde.
Como presidenta, los candidatos bonaerenses de la ahora vice fueron derrotados en 2009 y 2013, en manos de Francisco de Narváez y Sergio Massa. De todos modos, como explicó LPO, para controlar la Cámara de Diputados deberá mejorar los números en provincias hostiles, como la Ciudad de Buenos Aires o Córdoba.
No es una tarea fácil y el resultado se conocerá en noviembre. Después, ahà nomas, empezarán las definiciones sobre el nuevo Gabinete. Con el sistema de cupos firme.
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Nooo no si, yo creo en el castigo divino, mira como venimos.... Macri, Alberto... Falta ventajita y maximo.k... para completar " esta divina comedia ".
Después argentina, será.. potencia mundial
Renuncia.
SOS irremontable, una decepción que Va a hundir a todo el gobierno.
Pdta: cuando llegue delta y tengamos que aislarnos realmente con que " autoridad el presidente " le va a hablar al país?...
Anticipen la jugada, por favor, miren que en el barco estamos todos, delta es hiper contagiosa y falta la presidencial del 2023...