La Cámara de Diputados tratará este lunes en la comisión de presupuesto la ley que suspende por un año la aplicación del consenso fiscal y de ese modo habilita a los gobiernos locales a aumentar los impuestos como ingresos brutos, que grava la facturación de las empresas y es cuestionado por los referentes de Cambiemos.

Sin embargo, los gobernadores de esa fuerza respaldaron en 2019 la suspensión de la ley sancionada dos años antes y volverían a hacerlo ahora, a excepción de Horacio Rodríguez Larreta, que esa vez fue clave para juntar los votos pero en diciembre se salió del consenso fiscal por la quita a la coparticipación federal que le propició Alberto, como parte de la revisión de los fondos que recibe por el traspaso de la policía federal.  

La suspensión del Consenso Fiscal pesó cada vez que se trató en el Congreso, porque nunca sobraron legisladores que hablen mal de aquella ley, que entre otras cosas obliga a los gobernadores a controlar el ingreso de personal y reducir los impuestos más regresivos para reemplazarlos por otros que gravan a la propiedad y suelen quedar desfasados por demoras en las revaluaciones de propiedades.

División de Cambiemos en el Senado para votar el consenso fiscal 

De hecho, la ley le otorgaba al Gobierno la facultad de colaborar en una valuaciones de inmuebles de todo el país, pero nunca se activó y los gobernadores quieren volver a retocar ingresos brutos, que a diferencia de Ganancias grava la facturación sin importar los balances de las empresas.

"Para los que no saben de impuestos: solo acá en la Argentina el pseudo progresismo sube Ingresos Brutos, que pagan los pobres, y bajan impuesto a las Ganancias, que pagan los que ganan 150 mil pesos", protestó Luciano Laspina, diputado del PRO, durante la última sesión.

Luciano Laspina. 

LPOJuan Casas

Lo cierto es que esta vez Larreta no llamara a los diputados del PRO para que voten a favor, como en enero de 2020, cuando Sergio Massa llamó a sesionar con la certeza de que se sancionaría con dos tercios y varios macristas se rebelaron y casi tiene que pedir su retorno a comisión.

El jefe de Gobierno retiró a la Ciudad del acuerdo fiscal en diciembre y Martín Guzmán casi incorpora una restricción a los impuestos sobre los bonos del Banco Central (Leliq), la fuente de financiamiento sustitutiva elegida por Larreta, pero chocó con varios gobernadores que ya la aplican en sus provincias.  

La suspensión se aprobó en el Senado con el voto favorable de senadores de Cambiemos de otras provincias que gobiernan, como Corrientes y Jujuy, cuyo gobernador Gerardo Morales es uno de los favorecidos por esta ley. La grieta volverá  verse en comisión. Y en el recinto.