El último informe de Estabilidad Financiera del FMI corrigió al alza sus proyecciones de crecimiento para la Argentina: 5,8% en 2021 y 2,5% en 2022. Y si bien estos guarismos están en línea con las proyecciones de otros organismos, el Fondo aclaró que todavía persisten dificultades para la estabilización macroeconómica del país.

El informe, que proyectó 5,1% de crecimiento para las economías desarrolladas, estimó un crecimiento para el país mayor que el 4,8% del Banco Mundial, pero inferior al 7% que pronosticó el ministro Guzmán en la ley de Presupuesto. Además consideró que este año Argentina podrá cerrar su balanza comercial con un saldo positivo del 2,3% del PBI y conseguirá reducir el desempleo al 10,6% y el año próximo al 9,6%.

En otras palabras, para 2023 la economía seguirá sin recuperar ni su nivel de actividad de 2019 ni su nivel de empleo, pero este año y el próximo irá en el camino del a recuperación económica respecto del 9,9% decaída de 2020.

"Argentina, como muchos otros países de la región, también ha tenido que lidiar con muchas olas de esta pandemia y hay que destacar que las medidas de contención en las olas más recientes permitieron que el efecto sobre la actividad económica no fuera tan negativo como se había previsto anteriormente", dijo la editora del informe del FMI, Gita Gopinath,  durante la conferencia de prensa virtual desde Washington de este martes.

Para el conjunto de América Latina, el informe prevé recuperaciones económicas "a distintas velocidades" dependiendo del impacto de la nueva ola de covid en cada país. En su conjunto, ninguna economía conseguirá el 2021 revertir la caída del año pasado.

Solo dos países recuperarán los niveles de 2019, uno de ellos será China con 8,4% de crecimiento este año; y el otro, Estados Unidos con 6,4%. Europa, por su parte, crecerá 4,4% y no llegará a revertir la caída del 6,6% del año pasado, pero sí lo logrará en 2022 con un crecimiento del 3,8%.