La tensión entre Estados Unidos y México escaló al máximo este viernes luego que el fiscal General de México (FGR), Alejandro Gertz Manero, decidiera exonerar de todos los cargos por narcotráfico que enfrentaba el general y ex ministro de Defensa, Salvador Cienfuegos, blanco de una investigación por vínculos con el narcotráfico impulsada por agencias norteamericanas.

López Obrador, que tiene una sólida alianza con los militares de su país, ya había cuestionado públicamente la investigación contra Cienfuegos, a quien la justicia de estados Unidos había apresado en un aeropuerto de Los Angeles. El propio general dijo que fue víctima de una "operación" de la DEA, una idea que respaldó López Obrador. Luego de conseguir el gobierno de AMLO que Estados Unidos liberara a Cienfuengos y lo extraditara a México, se descontaba que Gertz Manero iba a exonerarlo, ya que se trata de un funcionario nombrado por López Obrador. Y así ocurrió.

Trump acuerda con AMLO retirar los cargos de un general acusado de narco y enfurece a Biden

Enterado de la decisión, que deja en ridículo a sus agencias, el Departamento de Justicia de Estados Unidos dejó trascender que aún tienen posibilidades de reabrir el caso contra el general, que fue ministro de Defensa del ex presidente, Enrique Peña Nieto, pero por su ascendencia en las fuerzas armadas mexicanas, es muy importante para AMLO.

Como respuesta a la resolución tomada por la Fiscalía General de la República, la vocería del Departamento de Justicia, Nicole Navas Oxman, declaró a la revista Vice: "Los Estados Unidos se reservan el derecho de reiniciar el enjuiciamiento de Cienfuegos si el Gobierno de México no lo hace".

López Obrador y el procurador de México, Alejandro Gertz Manero.

Cuartoscuro

La declaración también ocurre luego de los durísimos señalamientos del presidente mexicano López Obrador, cuando acusó a la DEA de "fabricar" acusaciones en contra del extitular de la DEA y cuestionó su profesionalismo en el abordaje de este caso, que relacionó al general con el cártel de Beltrán Leyva.

Además, el presidente no dejó de destacar que la detención de Cienfuegos ocurrió en las vísperas de las elecciones estadounidenses. "Quizá antes aún no tenían completa la investigación", señaló al relatar que el acusado había estado en Estados Unidos meses antes al arresto que ocurrió en octubre. En México, la resolución no tardo más que tres meses en generarse.

La declaración desde Washington se entreteje en la búsqueda de los militares para blindar al general. LPO reveló que están pidiendo una embajada como protección, anticipando ya una persecución por parte de la DEA. El grupo que rodea a Cienfuegos a puesta por conseguir su inmunidad diplomática de esta manera.

Cabe recordar que tras poco más de un mes detenido en Estados Unidos, el ex titular de la Sedena fue regresado a México por el Departamento de Justicia a cargo de William Barr que no encontró pruebas sólidas en su contra.

Para el Ejército sería una nueva estocada a la DEA luego que Washington anunciara que se reserva la chance de iniciar nuevamente pesquisas contra Cienfuegos. Por otra parte, no es algo común en la diplomacia mexicana de los años recientes designar embajador de corte militar.

Sin embargo, Luis Crescencio Sandoval ya tuvo su pequeña incursión en estos asuntos cuando el año pasado logró que su amiga, la periodista Isabel Arvide, fuera designada cónsul en Estambul, lo cual le generó críticas al Gobierno.

El Gobierno de López Obrador queda ahora ante una prueba que lo obliga a amortiguar estos ímpetus para evitar mayores conflictos. En Secretaria de Defensa de México, por ejemplo, ya se están preguntando, si tras publicada la reglamentación de la nueva Ley de Seguridad, desde la semana que viene se podrían deportar a agentes de la DEA que operan en México. La animadversión para con esta agencia nunca ha sido tan grande entre los oficiales mexicanos como en este momento.

Cabe recordar que tras poco más de un mes detenido en Estados Unidos, el ex titular de la Sedena fue regresado a México por el Departamento de Justicia a cargo de William Barr que no encontró pruebas sólidas en su contra. Los motivos de la detención y la explicación en torno a la liberación, siguen siendo los temas centrales de sus conversaciones privadas.

Según pudo conocer LPO, el general está convencido de que la pesquisa de Alejandro Gertz Manero tampoco encontrará evidencias sólidas en su contra. "Ustedes me conocen, saben de mi familia, saben de esta casa donde vivo hace años, lo que ven es lo que hay y eso lo va a ver el fiscal también", desliza ante sus interlocutores.

La DEA acusa a Cienfuegos de complicidad con Rafael Caro Quintero, jefe narco a quien se le atribuye la tortura y el asesinato del tristemente célebre agente de la DEA, Enrique Camarena.