La transferencia de la gestión de las cárceles vascas a Esukadi por parte del Estado está programada, desde el pasado mes de octubre, para marzo. Así lo acordaron ambos gobiernos y así lo confirmó el Ministerio de Política Territorial al Departamento de Gobernanza Pública y Autogobierno vasco hace dos meses.
El foco está en Bildu, pero el PNV sigue siendo socio preferente del Gobierno. Lo afirmó el jueves María Jesús Montero, justo después de ver aprobados sus Presupuestos, pero también lo reconocen en privado altos cargos de Moncloa y Ajuria Enea. De puertas para afuera, no se han anunciado grandes reuniones o acuerdos con los nacionalistas vascos, pero el gran pacto, el que afecta a la competencia de Prisiones, está ya cerrado y tiene fecha de aplicación.
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El organismo que dirige Carolina Darias remitió a Íñigo Urkullu y Josu Erkoreka un cronograma que contempla culminar las transferencias pendientes en tres bloques. En el primero de ellos, donde se incluyen hasta doce transferencias, aparecía la gestión de las prisiones de Zaballa (Araba), Basauri (Bizkaia) y Martutene (Gipuzkoa).
Desde entonces, no se han anunciado novedades por parte de ninguno de los dos gobiernos, pero esa falta de información no quiere decir que no se hayan producido avances en un proceso de transferencia que, pese fecharse para marzo, ya se ha iniciado: "La comunicación entre los Ministerios de Interior y Justicia y la Consejería de Justicia es constante".
Así lo aseguran a LPO altos cargos de ambas administraciones -central y autonómica-, que ponen fecha a la gestión por parte del País Vasco de las cárceles en su territorio: "Se ha anunciado para marzo, que es cuando quedará oficializada por escrito, pero se hará efectiva el 1 de abril del año que viene".
A partir de ese día, afirman las fuentes consultadas, todos los presos de las cárceles vascas, incluidos los diez miembros de ETA que cumplen condena en las mismas, pasarán a depender de la Consejería de Justicia de Euskadi: "Los permisos, los terceros grados y también las puestas en libertad serán decididos por el Gobierno Vasco".
El departamento que actualmente dirige Beatriz Artolazabal, de hecho, ha empezado a recibir informes del Ministerio del Interior sobre la población reclusa de las tres cárceles vascas, así como de los recursos, materiales y humanos, con los que cuenta. No hay que olvidar, destacan desde Prisiones, que "todos los funcionarios que trabajan en esos centros también dependerán del Gobierno Vasco".
La transferencia, por tanto, no se ha oficializado ni se ha ejecutado como tal, pero ya se ha iniciado: "el traspaso de poderes está en marcha, con el objetivo de que el 1 de abril sea la consejería la que se encargue de Zaballa, Basauri y Martuente.
Sobre los presos de ETA que podrían llegar al País Vasco procedentes de otras prisiones de España a partir de esa fecha, las fuentes consultadas prefieren "no anticipar acontecimientos", aunque "es evidente que se producirán muchas peticiones de traslado y que se abrirá un proceso en ese sentido". Pese a ello, advierten que "se seguirán todos los procedimientos habituales y tendránq ue cumplir con las exigencias que se piden ahora para los acercamientos".
En la actualidad, 197 presos de ETA cumplen condena en cárceles españolas y, desde la llegada de Fernando Grande-Marlaska al Ministerio del Interior, 84 de ellos han sido acercados a prisiones próximas al País Vasco. Según los datos del Interior, más de un 7% los etarras encarcelados continúa apoyando la violencia.
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