En el entorno de Cristina Kirchner existe un fuerte malestar por la denuncia que la involucra con el ingreso de barrabravas a la Casa Rosada durante el velorio de Diego Maradona.

Ese disgusto nada tiene que ver con la cuestión judicial, sino con el hecho de que quien presentó la denuncia es un ex funcionario de Axel Kicillof. Se trata del ex titular de la Agencia de Prevención de Violencia en el Deporte (ApreViDe), Juan Manuel Lugones.

El funcionario es un abogado que supo trabajar para Margarita Stolbizer y durante el gobierno de María Eugenia Vidal, Cristian Ritondo lo designó al frente de esa agencia que depende del ministerio de Seguridad bonaerense y es la encargada de evitar la violencia en los espectáculos deportivos, especialmente en los estadios de fútbol.

Con la llegada de Kicillof a la provincia y Sergio Berni a la cartera de Seguridad, todo indicaba que Lugones saldría eyectado de su cargo. Sin embargo, el funcionario -de origen radical- supo lograr empatía con el ministro, quien estaba decidido a sostenerlo.

Lugones se mantuvo al frente de la ApreViDe hasta los primeros días de noviembre y su salida no estuvo vinculada a su pasado como funcionario de Vidal, sino a una denuncia que presentó una efectivo de La Bonaerense quien lo denunció por abuso sexual.

En esa presentación, la agente sostuvo que el funcionario la manoseaba, la denigraba y, ante la negativa a salir con él, fue castigada con un traslado a otra jurisdicción. La fiscal reconoció que tiene 16 testigos que avalan la acusación y espera que el juzgado de Garantías N°3, a cargo de Pablo Raele, defina el inicio del juicio.

Berni resistió su salida. Incluso, a principios de octubre, cuando desde el entorno del Gobernador dejaron trascender que Lugones había presentado finalmente su renuncia, desde la cartera de Seguridad lo negaban de plano y explicaban que solo había pedido una licencia médica.

En La Plata aseguran que quien se ocupó de "limar" a Lugones durante los últimos meses fue Mario Baudry, el jefe de Gabinete de Berni. Baudry es una figura vinculada a los medios de comunicación y al entorno de Maradona (es pareja de Verónica Ojeda). Pero además, esta decidido a quedarse con el control de la Agencia de Prevención de la Violencia, una jugosa caja de recursos dentro del ministerio que conduce Berni.

Quienes defienden al ex funcionario explican que, pocos dirigentes cuentan con experiencia en un tema tan singular que incluye la coordinación de la seguridad del fútbol, el básquet y el automovilismo; las internas de los barrabravas y el manejo de los efectivos de La bonaerense.

Incluso afirman que la denuncia por abuso estuvo vinculada al arrastre de varios enfrentamientos con La Bonaerense que tiene en los operativos de seguridad deportiva un nicho de recursos.

Axel Kicillof y Sergio Berni.

Aglaplata

La denuncia

Ya afuera del poder, Lugones que reconoció la presencia de barras durante el velorio de Maradona y apuntó contra la llegada al lugar de siete micros de la barra brava de Gimnasia y Esgrima La Plata que, según precisó, "se dio en una perfecta coordinación para acompañar el ingreso" de Cristina.

En un escrito que lleva su firma, Lugones pidió que se fije una audiencia para ratificar la denuncia y aportar más pruebas.

"Vengo a solicitar que se investigue si existió una zona liberada para permitir el ingreso de grupos denominados 'barrabravas' de distintos clubes de fútbol a la Casa de Gobierno de la Nación Argentina el pasado 26 de noviembre de 2020, en ocasión del servicio de velatorio de Diego Armando Maradona, cuya coordinación del operativo de seguridad estuvo a cargo de la Casa Militar dependiente de la Secretaria de Presidencia de la Nación", sostuvo Lugones en el escrito.

Y agregó: "Para el caso que haya existido 'zona liberada' vengo a solicitar se investigue la responsabilidad de los funcionarios públicos del Poder Ejecutivo Nacional a cargo y se los investigue por el delito de incumplimiento de los deberes del funcionario público y el abuso de autoridad".