Durante algunas horas de aquel domingo 27 de octubre del 2019, el Frente de Todos en Córdoba festejó creyendo que había logrado tres escaños para Diputados. La ilusión se desvaneció cuando, entrada la noche, Juntos por el Cambio confirmó para su fuerza seis de los nueves lugares que se disputaban para la Cámara Baja (el schiarettismo obtuvo la restante).

Quien se quedó arañando la banca por el kirchnerismo fue Pablo Chacón, hombre de Sergio Massa en Córdoba. La incorporación del secretario General de la Asociación Gremial de Empleados de Comercio (Agec) en la lista de Alberto Fernández en Córdoba, se dio a último momento y fue una sorpresa para el espacio que apostaba a otros nombres. De hecho, generó tensiones con el otro sector sindical representado por Franco Saillén, del gremio de recolectores de residuos.

Chacón respondió los embates internos asegurando que su desembarco en el tercer renglón de la boleta era parte del acuerdo político entre el líder del Frente Renovador y el entonces candidato a presidente. Fin de la polémica.

Sin embargo, aunque no le alcanzó, el jefe de los empleados de comercio ratificó su pertenencia al Frente Renovador dejando pendiente una visita de Massa a Córdoba que, originalmente, tenía fecha para marzo pasado cuando arrancó la cuarentena.

Ahora, el presidente de la Cámara de Diputados pidió activar su línea en Córdoba y trabajar para consolidar la representación en la provincia.

Con la excusa del Congreso Nacional del Frente Renovador previsto para el 15 de noviembre, Massa buscará movilizar a los suyos en todo el país. Y Chacón podría ser de la partida de dirigentes que asista de manera presencial al evento.

En el objetivo macro trazado por el Frente Renovador, Córdoba ocupa un capítulo importante.

Por ahora, el senador Carlos Caserio y la diputada Gabriela Estévez tienen la exclusividad en cuanto a la representación del Frente de Todos en la provincia; el primero como delegado de Alberto y la segunda, como dirigente de línea directa con Máximo Kirchner. Muestra de ello es que la mayoría de las reparticiones de Nación en la provincia, están ocupadas por funcionarios que políticamente responden a uno u otra.

Por eso la idea del massismo cordobés es ampliar su espacio para comenzar a ser parte activa de la discusión política local y ganar mayor protagonismo en ese esquema.

En diálogo con LPO, Chacón dijo que del Congreso se esperan los primeros lineamientos de trabajo, pero confirmó que su misión es "reforzar y ampliar la expresión de Sergio Massa en Córdoba" y aportar la pata sindical al espacio nacional aliado al gobierno de Alberto y Cristina.

El jefe de los empleados de Comercio representa a una porción del gremialismo local enrolado en el Movimiento de Trabajadores Córdoba, una de las agrupaciones obreras que le aporta estructura política y territorial. Desde allí espera ampliar el espacio y ganar volumen mirando el armado que se viene para el ´21.

Aunque por ahora Chacón prefiera decir que el objetivo está puesto en el trabajo territorial, desde el massismo aseguran que su nombre estará estampado nuevamente en la boleta del año que viene. Eso, más allá de cómo terminen las conversaciones entre Hacemos por Córdoba y el Frente de Todos.

Por su afinidad con el delasotismo, al igual que el propio Massa, Chacón mantiene diálogo con la hija del ex gobernador, la legisladora Natalia de la Sota, mientras cultiva una muy buena relación con el mandatario provincial, Juan Schiaretti.