El gobierno porteño se prepara para el día del estudiante y busca incrementar los controles para evitar las "juntadas" o al menos lograr que se cumpla el distanciamiento social entre los jóvenes.

LPO pudo saber que la Ciudad tendrá más de 500 "concientizadores" en los parques capitalinos, que en la "vieja normalidad" eran el epicentro de los encuentros entre estudiantes, en especial los Bosques de Palermo, donde se congregan todos los 21 de septiembre cientos de miles de personas.

También habrá controles en bares y restaurantes para intentar que la gente cumpla con la distancia que establecen los protocolos, algo que por el momento parece complicado. "Vamos a tener la misma cantidad de agentes que un día del fin de semana", explicaron.

Ginés criticó la apertura de bares y en la Ciudad hablan de "indignación selectiva"

En el gobierno porteño reconocen que es difícil disuadir a los jóvenes de que festejen su día tras más de seis meses de cuarentena y por eso los "chalecos amarillos" circularán por los parques y plazas capitalinos. Dos semanas atrás se encendieron las alarmas en Parque Patricios después de que circularan imágenes de aglomeraciones de gente en las puertas de los bares.

El propio ministro de Salud, Fernán Quirós, dijo que ese tipo de conducta no era "buena" y en el gobierno porteño intentan que no se repita la postal que generó preocupación. Sobre todo porque en las últimas semana comenzaron a bajar los contagios en el distrito, pero siguen en un nivel alto.

La legisladora Claudia Neira, titular de la comisión de Espacio Público, reclamó incorporar un diagnóstico certero sobre los usos del espacio público y verde de la Ciudad a la hora de planificar y ordenar las reaperturas. "Las aperturas se generan en lugares donde hay concentración de actividad, especialmente de actividad económica, y eso genera superposición de usos en algunos lugares de la Ciudad", señaló la diputada del Frente de Todos.