La tensión entre Horacio Rodríguez Larreta y Alberto Fernández se trasladó a la Legislatura. El peronismo abandonó sus bancas tras una maniobra del oficialismo para cambiar el contenido de una declaración de repudio al asedio de la quinta presidencial, donde se agregaban críticas al decreto que modificaba la coparticipación.

El oficialismo no había reunir los 40 votos necesarios para tratar sobre tablas el rechazo a la decisión de disminuir la coparticipación de la Ciudad en 1,18%. El interbloque de Juntos por el Cambio y aliados cuenta con 39 escaños y los 21 legisladores restantes pertenecen a la izquierda y el peronismo.

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Sí se aceptó discutir un repudio a las protestas policiales frente a la Quinta de Olivos propuesto por Juan Manuel Valdés. Toda la sesión estuvo cruzada por declaraciones contra el decreto sobre la coparticipación que surgieron desde el oficialismo.

Cuando llegó el turno de discutir esa iniciativa, Martín Ocampo, del interbloque de Juntos Por el Cambio, propuso agregados al texto de Valdés que rechazaban el recorte de fondos.

"Cuando se está por votar lo de Valdez le quieren hacer un agregado que tenía que ver con la coparticipación. El artículo 234 dice que las modificaciones tienen que mantener la unidad del debate. Era clarísimo que era otro tema: uno era sobre el asedio y otro sobre la coparticipación. Podés cambiar la redacción, no el contenido. Ellos planteaban que había una relación directa entre el asedio a Alberto y la baja de la coparticipación", explicaron desde el peronismo a LPO.

Los legisladores entraron en un debate sobre la legalidad del argumento que incluyeron consultas al parlamentario de la presidencia y desde el oficialismo decidieron avanzaron con la votación. En ese momento María Rosa Muíños anunció que el bloque peronista se retiraría de sus bancas y los legisladores que quedaron en el recinto aprobaron la iniciativa.