Las cuatro corrientes internas de la UCR de Santa Fe tuvieron su encuentro virtual para poner sobre la mesa las distintas posiciones e intentar zanjar las diferencias que arrastran desde la convención de Gualeguaychú, cuando el partido a nivel nacional se encolumnó dentro de Cambiemos que provocó la fractura en la provincia que gobernó junto al Frente Progresista.

Coordinado por Carlos Fascendini, presidente de la UCR local, y con la participación de Alfredo Cornejo, el radicalismo encaró un nuevo intento de unidad en tiempos donde son oposición al gobierno nacional y provincial y la necesidad apremia.

"Hemos tenido intervenciones del partido nacional, hemos integrado distintos frentes pero ahora el rumbo que tomó el gobierno nacional y provincial nos obliga a retomar la unidad partidaria y nuestro rol de opositores y contribuir a un nuevo proyecto para Santa Fe que Perotti ha paralizado", criticó Fascendini.

A su vez, el presidente de la UCR señaló que "estamos a un año de que se recomience un nuevo proceso electoral; comienzan los tiempos donde tengamos que definir a los candidatos", tanto nacionales como locales y más cuando uno de sus fuertes es el desarrollo territorial gobernando más de 200 localidades y muchas con elecciones ejecutivas el año próximo.

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Es por ello que la estrategia de alianzas no solo se limita al modelo político a adherir sino que es una cuestión de supervivencia para muchos intendentes y jefes comunales: "el radicalismo es el eje de cualquier coalición que se quiera formar; lo es en Juntos por el Cambio y también en el Frente Progresista", alentó Alfredo Cornejo quien pidió dejar atrás y dar por superado los conflictos pasados.

 Lo hecho para atrás, hecho está, no recriminarse entre ustedes. Hay un espíritu colaborativo y yo vengo a apoyar esa actitud 

El presidente de la UCR a nivel nacional fue cuestionado duramente por los radicales que se encuadraban en el Frente Progresista cuando el mendocino decidió intervenir el partido provincial el año pasado en la previa a las elecciones. Esta vez, más de 300 participantes de los distintos sectores se volvieron a reunir a través de la plataforma Zoom: "Lo hecho para atrás, hecho está, no recriminarse entre ustedes. Hay un espíritu colaborativo y yo vengo a apoyar esa actitud", reiteró Cornejo.

Por su parte, los espacios más reticentes a sellar un acuerdo con el macrismo destacaron la gestión de 12 años del Frente Progresista en Santa Fe: "valoramos la transformación que logramos en la provincia y reivindicamos la posibilidad que les dio esta coalición a muchos intendentes y jefes comunales que pudieron gobernar a través de esta experiencia. La UCR no puede ser expresión del conservadurismo", señaló Fabián Oliver.

En un sentido similar se expresó Maximiliano Pullaro, presidente del bloque progresista en la Legislatura y uno de los dirigentes más cercanos al socialista Miguel Lifschitz. Mientras que el cambiemista Julián Galdeano propuso un marco de unidad "e ir a un frente buscando el protagonismo del radicalismo. Si partimos de las diferencias, se dinamita la posibilidad de unidad".

Pero más allá de las intenciones que se repiten insistentemente en los comités provinciales, de un lado y del otro coinciden en que en un escenario de extrema polarización, como el que se está planteando, en el territorio, intendentes y jefes comunales optarán por seguir la estrategia que les garanticen la continuidad de sus mandatos, una realidad incómoda para los que trabajan en sostener una tercera vía progresista.