El ataque verbal del conductor Ángel "Baby" Etchecopar a Cristina Kirchner, a quien denominó "el cáncer de la Argentina" en el programa de Mirtha Legrand, acaparó la demorada sesión constitutiva de la comisión de Sistemas, Medios de Comunicación y Libertad de Expresión.

Seguirá presidida por Alfredo Luenzo, del Frente de Todos; y su vice será el radical Juan Carlos Marino. Después de asumir, escucharon como la reunión inaugural era dominada por las polémicas frases de Etchecopar .

"No puedo dejar de repudiar los dichos del periodista hacia nuestra vicepresidenta. Que la libertad de expresión no se transforme en una libertad de violencia, sobre todo a la mujer", protestó la correntina Ana Almirón, sin nombrar al acusado. 

El oficialismo ya había hecho sentir el peso político contra Baby: este lunes, legisladores del Frente de Todos lo denunciaron ante la Defensoría del Público de Servicios de Comunicación audiovisual, que está a cargo de Miriam Lewin.

Además de definirla como un cáncer, el conductor dijo que Cristina "es una señora sola, una señora que el único poder que tiene es el poder. Creo que es una señora que no quiere a nadie. Creo que se mira espejo y dice: estoy espléndida para cortar cabezas, salgo a arruinarle la vida a la gente. Si Cristina sigue en la Argentina, la Argentina se termina".

Se animó a defenderlo el salteño Juan Carlos Romero, del interbloque federal, convertido en aliado de Cambiemos. "Más allá de opiniones imprudentes o agresivas, el valor de la libertad de prensa está por encima de otros valores". 

"Si bien es cierto que la perspectiva de género es muy importante, me parece que estamos cayendo en el riesgo de que cualquier opinión, que hace a la libertad de prensa y que involucre a una mujer, pueda considerarse que es un ataque a la Ley de Protección que existe". Y minimizó el cruce entre Cristina Pérez y Alberto Fernández. "No querría que en la comisión nos viéramos envueltos en limitar la libertad de prensa".

Más enfática fue la radical tucumana Silvia Elías de Pérez. "Lo peor que podríamos hacer es poner una comisión mordaza en el Senado, a donde cada vez que un periodista diga algo que no nos gusta, salgamos nosotros a reprocharlo. Que bajo ningún punto de vista que se cercene la libertad de expresión de ningún periodista".

Pero el Frente de Todos dejó claro que no abandonará el debate tan rápido. La fueguina María Eugenia Duré anticipó que propondrá capacitar a periodistas sobre "violencia hacia las mujeres" y un rato más tarde Romero anticipó que no lo permitirá. "Creo que es forzado. Porque si es así, si atacan a Alberto Fernández no sería violencia de género".

Fotografía HCSN

El jefe del oficialismo José Mayans fue más genérico. "Este periodista se especializa en la provocación, en la humillación, en la descalificación y en buscar la forma de despretigiar a las personas. Estos abusos no pueden permanecer en los medios, prácticamente destrozando la reputación de las personas", completó.

"Si yo digo que Raúl Alfonsín es un narcotraficante me saldría todo el radicalismo a atacar. Nosotros tenemos figuras como Perón, Eva y Cristina, por quien tiene aprecio un sector grande de la sociedad", completó el formoseño.

Beatriz Mirkin pidió que una verdadera democracia haya igualdad para hombres y mujeres y Romero le recordó sus amenazas de golpear a su compañera Clarita Vega. "Me disculpé con un tuit", se jactó la tucumana.  

Mariano Recalde definió sin vueltas como "violencia política" e "incitación al odio" las frases de Baby. "Referirse a que la vicepresidenta está sola es un comentario machista, que no se lo haría a un varón. Como si la mujer que no tiene marido está afectada". Se sumó el catamarqueño Dalmacio Mera. "Están faltando el respeto a la presidenta del cuerpo y eso afecta el sistema democrático. Ella nos representa a todos". 

En segundo plano quedó la agenda de la comisión, que demoró mucho en conformarse y tal vez en las próximas semanas trate la ley de economía del conocimiento y la de teletrabajo, que este miércoles tendría dictamen de comisión. Ambas estarían en una sesión del jueves que aún debe confirmarse.

De todos modos, Mayans y Luenzo anticiparon que podrían tratar los proyectos sobre teletrabajo que hay en el Senado si no se aprueban en la brevedad en la Cámara vecina. "Está teniendo problemas para sesionar", alertó.