El ex presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Emilió Monzó, rompió el silencio y, fiel a su estilo de hombre polÃtico y conciliador, expresó que "la del Presidente junto a RodrÃguez Larreta, Perotti, Morales y Kicillof es una de las mejores fotos que ha ofrecido la polÃtica en los últimos años, igual que la imagen del consenso que se exhibió al anunciar la estrategia por la deuda y la del trabajo coordinado con gobernadores e intendentes".
Monzó fue más allá y pidió que "tenemos que lograr, entre todos, que esas fotos simbolicen el espÃritu de una nueva era institucional en la Argentina. Debe ser una era dominada por la búsqueda de acuerdos, por el debate constructivo, por las discrepancias civilizadas y por las polÃticas de Estado. Debe ser una era que deje definitivamente atrás la lógica de amigos-enemigos y que cierre la grieta para abrir un camino de esperanza".
"Los argentinos deberemos lidiar con desafÃos de dimensiones mayúsculas. No podemos calibrar todavÃa los alcances del cataclismo que provocará la pandemia. Frente a eso, la capacidad de los polÃticos para unirnos, para generar consensos, para trabajar en conjunto y cooperar en la construcción de objetivos comunes, será la mejor defensa ante las adversidades. Debemos inaugurar, de una vez por todas, la era de los acuerdos y de la concertación. Lo proponemos desde hace años, pero ahora -frente a la amenaza global del coronavirus - se convierte en mandato ineludible y en un imperativo ético", continuó.
Según el ex presidente de la Cámara de Diputados, "al mundo entero se le han quemado los papeles. Por eso debemos ser, en primer lugar, humildes frente a un contexto de compleja incertidumbre. Todos los libros y manuales nos han quedado viejos. Debemos construir, entonces, un nuevo paradigma de acción polÃtica a partir de la cooperación, sin mezquindades ni oportunismos, sin facilismos ni demagogias".
Para Monzó es responsabilidad de la dirigencia polÃtica empezar a mirar el mediano y el largo plazo. "Desde el lugar en el que nos encuentre, nuestra preocupación primordial debe ser la de colaborar para construir el camino de salida. No podemos dejar esto en el plano de las buenas intenciones. Debemos plasmarlo, con espÃritu constructivo, en un gran acuerdo nacional que nos permita reparar el ánimo de nuestra sociedad, reconstruir los cimientos de una economÃa que quedará severamente dañada y fortalecer un sistema de salud pública que nos ofrezca mayores garantÃas".
En relación al rol que debe tener la polÃtica ante este conflicto el dirigente bonaerense cree que "debe recuperar su sentido básico y esencial: el de la ayuda al prójimo. Hoy, más que nunca, la polÃtica pasa por entender y por cuidar al otro. Debemos hacer de esto una épica, no un eslogan. Debemos reflejarnos en esa Argentina que expresan los aplausos de las 9 de la noche: la que reconoce a médicos, enfermeros, cajeros de supermercados, recolectores de residuos, agentes de seguridad. Debemos interpretar, desde la dirigencia polÃtica, ese espÃritu de la Argentina solidaria. Y convertirlo en trabajo conjunto, por encima de cualquier rencilla facciosa, de fanatismos adolescentes y de especulaciones coyunturales. En nuestro caso, la salida probablemente resulte más compleja todavÃa, porque no podemos engañarnos: arrastramos desde hace décadas problemas y debilidades estructurales, con un tejido social muy fragmentado y dolorosÃsimos niveles de pobreza. El desafÃo es tan enorme que no admite un milÃmetro más de grieta".
"Frente a la angustia de estas horas oscuras, debemos forjar y ofrecer una esperanza. Y esa esperanza pasa por la capacidad que tengamos de construir la unidad de los argentinos, que por supuesto, no implica pensamiento único ni ausencia de debate democrático y de ejercicio de control. Hay una certeza a la que podemos aferrarnos: la humildad, la solidaridad y la cooperación polÃtica son los valores que nos ayudarán a enfrentar lo que vendrá", finalizó Monzó en la columna de opinión publicada por el diario La Nación.
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