Tras anunciar 365 muertos en una sola jornada y casi 1700 fallecidos desde que comenzó la pandemia de Coronavirus, Francia autorizó un tratamiento alternativo. A partir de este jueves 14 hospitales comenzarán a tratar a los pacientes con Hidroxycloroquina y azitromicina, medicamentos que se utilizan contra la malaria.

El decreto que permite el tratamiento fue publicado pocas horas atrás en medio de una ola de contagios que ya puso a Francia en el séptimo lugar a nivel mundial.

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La biblioteca gala observa con desconfianza a Didier Raoult, un microbiólogo e infectólogo, que trabaja en Marsella. Su cabello blanco y largo lo emparenta con el druida Panoramix y D´Artagnan y eso no lo ayuda demasiado ante la opinión pública. Sin embargo asegura que el 75% de sus 24 pacientes tuvo mejorías tras seguir el tratamiento que normalmente se utiliza para la malaria.

Incluso la OMS alertó contra las "falsas esperanzas" que producen "ciertos tratamientos", en referencia a la Cloroaquina. Pero ante el inminente desborde de los hospitales públicos, el gobierno autorizó el protocolo de Raoult, que Instituto Mediterráneo de Infección en el Hospital Universitario (IHU) .

El tratamiento propuesto por Raoult generó revuelo en Francia ya que el infectólogo "no respeta las reglas éticas que actualmente están en vigor en Francia", según aseguraron desde el diario Le Monde.

Precisamente el infectólogo les envió una carta donde afirma que "los verdaderos problemas deontógicos y morales no son más prioritarios en este momento". El diario, ligado al socialismo francés, emparenté a Raoult con la derecha, un partido que tiene varios políticos infectados con Coronavirus.

El remedio también comenzó a testares en Brasil contra el lupus y la malaria y Bolsonaro ordenó que empiece a fabricarse en los laboratorios de las Fuerzas Armadas.