Si bien el coronavirus llegó a México la semana pasada, hasta ahora el contagio más fuerte ha sido en los mercados financieros, que han reaccionado con nerviosismo, por ahora, los especialistas ya empiezan a considerar este factor como clave para sus pronósticos de crecimiento económico. En contracorriente, Andrés Manuel López Obrador vuelve a mostrarse optimista: "No vamos a tener mayores problemas", afirmó este lunes.

 El gobierno nacional confirmó el pasado viernes la existencia de 3 casos de coronavirus en México, aunque aseguró que el escenario no justifica una emergencia nacional por el virus respiratorio.

Aunque el mercado accionario y el peso mexicano siguen cayendo esta semana, el mandatario dijo en su conferencia matutina que la divisa mexicana ha resistido "esta primera etapa de propaganda del coronavirus". Aunque sí reconoció un grado de afectación.

Para comprobarlo, mostró una gráfica en donde se observa la apreciación que ha tenido el peso frente al dólar en su mandato, es decir, del 30 de noviembre al 28 de febrero, y resulta en un 3.55% tan solo por debajo de la divisa japonesa, en 5%, y la tailandesa en 4.03%.

"Es un asunto mundial, pero cada vez van a estar más tranquilos los mercados, ese es mi pronóstico. Los conservadores que quisieran que nos fuera mal, van a decir que está mal mi pronóstico y que vamos a tener crisis económica y financiera. Yo digo no. Está bien nuestra economía, tenemos finanzas públicas sanas y está fuerte nuestra moneda", dijo.

Lo cierto es que los especialistas económicos y financieros ya contemplan los riesgos de esta enfermedad en la economía mundial y sus impactos en el país. El más reciente fue el de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) que redujo su pronóstico del 1.2 a 0.7% para el cierre de este año. También para 2021 consideró un menor crecimiento al pasar su proyección del 1.6 al 1.4%, alejándose del pronóstico de la Secretaría de Hacienda.

Estas nuevas predicciones se ven impactadas por el virus, pues consideró que la economía mundial solo va a crecer 2.4% y no 2.9% como contemplaba en su análisis anterior. Incluso, avisa que el primer trimestre de este año podría haber un dato negativo.

De acuerdo con el organismo que representa José Ángel Gurría, una mejora en la economía de México será posible solo con "medidas de política bien enfocadas".

Antes de la OCDE, el Banco de México (Banxico) también dejó ver que este tema de salud mundial ya forma parte de sus preocupaciones por la incertidumbre que está generando en los mercados financieros y su eventual impacto en el mercado cambiario mexicano, y, por tanto, en la inflación. En ese sentido, también se mostraron más pesimistas y también recortaron su pronóstico, contemplando en un rango intermedio el 1%.

Para la jornada de este lunes, el nerviosismo sigue siendo visible en el tipo de cambio, pues el peso arrancó con una depreciación de 0.85% o 16.7 centavos, cotizando alrededor de 19.81 pesos por dólar, al continuar la percepción de riesgo en los mercados financieros globales como consecuencia del coronavirus.