Las organizaciones que apoyan la legalización aborto se reunieron este miércoles en el Congreso con diputadas para definir una estrategia ante el inminente envÃo de un proyecto de ley. Y el acuerdo unánime fue no aceptar un texto más suave que el aprobado en 2018 en la Cámara baja y rechazado en el Senado.
La aclaración no fue menor: como publicó LPO, el presidente analiza implementar la objeción de conciencia institucional, que en los hechos les permitirÃa a las clÃnicas privadas excusarse de implementar la práctica.
Pero las verdes, agrupadas en la campaña nacional que recorre las calles hace 15 años, no estas dispuestas a realizar esa concesión y asà lo dejarán claro en la manifestación del miércoles 19, cuando para marcar la cancha exigirán tomar como base el proyecto que presentaron el año pasado por mesa de entradas.
Ese texto ni siquiera contempla la posibilidad de una objeción de conciencia individual, como el aprobado en Diputados en 2018, que le permitÃa a un profesional excusarse de practicar el aborto pero obliga a las clÃnicas a realizarlo en no menos de cinco dÃas con otros médicos contratados para la ocasión.
"Tenemos que tomar como base el proyecto de la campaña, que es el que está vigente y no dejarnos llevar por lobbys eclesiásticos", solicitó Romina del Plá, diputada del frente de izquierda y una de las negociadoras de aquella gesta de 2018. Pidió que esa sea la consigna del miércoles y que quizá sea preferible otro acto después del 1 de marzo, cuando el presidente deberÃa dar más precisiones.
Por ahora, Alberto trabaja en secreto el proyecto junto a Vilma Ibarra, secretaria legal y técnica; y el ministro de Salud Ginés González GarcÃa, quien le anticipó a sus colegas de las provincias que el proyecto contemplarÃa objeción de conciencia institucional y por lo tanto las clÃnicas vinculadas a la Iglesia no tendrá pacientes.
Pero igual de ruido hicieron las declaraciones de Alberto en ParÃs, donde si bien garantizó que enviará el proyecto como prometió en campaña, lo restringió al sistema de salud pública y habló de una "despenalización" y no de "legalización", como exige la militancia verde, porque además de evitar una condena y significa la regulación de la práctica.
Además, si se restringiera a la salud pública, no estarÃa garantizada su inclusión en el Programa Médico Obligatorio (PMO) y las obras sociales podrÃan no cubrirlo. Las diputadas oficialistas que estaban en la reunión (Mara Brawer, Mónica Macha y Gabriela Estévez) dijeron desconocer el proyecto que enviará Alberto y escucharon las advertencias sin chistar.
Entre las opositores estaban referentes de 2018 como las radicales Brenda Austin, Karina Banfi y Carla Carrizo; y Silvia Lospennato, del PRO, recordada por el discurso de cierre de aquella madrugada.
Otro tema estratégico es la Cámara de origen. Las verdes quieren Diputados, donde confÃan en ganar cómodamente para luego dar la batalla final en el Senado, que si bien sigue siendo más hostil cuenta con nuevos referentes capaces de colaborar, como MartÃn Lousteau.
"Necesitamos militar mejor cuando se trate en esa Cámara, con visitas a las provincias para que se sientan respaldados. Y para eso es mejor que primero se apruebe en Diputados", explicó a LPO una de las diputadas dispuestas a dar la batalla.
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- 514/02/2016:02Nunca fueron mas coherentes. Son clase media alta las que reclaman, y no quieren pisar un hospital publico. mucho chetaje.... mucha militancia pero no las sacas del ephone y OSDE.....
- 414/02/2010:23Odio al hombre absoluto.
- 314/02/2005:23La dictadura verde...que incoherentes son.
- 214/02/2000:04Encima quieren que les financiemos el garche libre con las prepagas. Porque no se van a la vagina de sus ra meras progenitoras!
- 113/02/2022:05Lo único que falta es que las verdes se ofendan con Alberto por permitir, si lo hace, la objeción de conciencia institucional. Me voy a divertir bastante si llega a pasar