Alberto Fernández presentará formalmente a su gabinete el 6 de diciembre, cuatro días antes de asumir la presidencia. Desde su entorno aseguran que ya tiene el 90% de los nombres definidos, aunque todavía hay dudas sobre quién irá a Economía, el ministerio más complejo y que genera impaciencia en los mercados.

"Sólo queda definir un 10% de los cargos. Están cerrándose las segundas líneas y las secretarías", dijeron desde el entorno de Alberto a LPO. Lo cierto es que después de la primicia de este medio sobre las dudas en torno a Guillermo Nielsen y su posterior veto, el tema volvió a foja cero. Ante la falta de un interlocutor válido, los bancos y los fondos de inversión ya vaticinan una negociación tensa de la deuda argentina. 

Nielsen ya había tenido reuniones con fondos de inversión y anticipado una idea de lo que podían hacer, pero ahora volvió la preocupación, que desde el Frente de Todos buscan apaciguar al darle mayor protagonismo al ministerio de Producción e Industria que seguramente quedará en manos de Matías Kulfas.

Impaciencia en los mercados por falta de definiciones de Alberto Fernández 

El problema es que esa cartera -en la que aún se debate si incorporará o no a Energía y Agricultura- no es la que definirá los temas cruciales de la próxima gestión como el presupuesto y la deuda. Por eso, el mercado está atento a quién será finalmente el que encabece Hacienda, mientras todos los consultores aseguran que lo primero en el gobierno que asuma el 10 de diciembre deberá atajar es la deuda. 

La danza de nombres vetados, que todavía está supeditada a revisiones, empezó con Carlos Melconian en un coqueteo incipiente que no tardó en enfriarse. Luego apareció la chance de Martín Redrado, que sufrió la negativa de Cristina Kirchner pero en la última reunión con Alberto fue insistente y la chance quedó abierta. De hecho, en esa última charla se hizo un silencio y el presidente electo sugirió que lo pensaría, lo que da la pauta de que esa opción se podría retomar.

Cuando perdieron fuerza las opciones Melconian y Redrado empezó a instalarse la opción Nielsen, que como contó LPO fue desechada el lunes tras la reunión con Alberto que no terminó bien.

En plena incertidumbre empezó a sonar el nombre de Martín Guzmán, un académico muy respetado pero sin experiencia en gestión. En los últimos días también se mencionó a Rodolfo Santángelo, que sería una jugada aprobada por el mercado que reconoce su formación en temas bancarios y monetarios, además de su solidez y que cuenta con equipo propio. Sin embargo, desde un sector del Frente de Todos opinaron que la versión no es viable.

En Wall Street se impone el recelo luego de la cantidad de posibles interlocutores que viajaron a reunirse con fondos y reunir a los acreedores, pero sin que luego se confirmara el voto de confianza del futuro presidente. Lo cierto es que Alberto tenía un plan de gabinete económico armado, que entró en crisis lugo de su reunión con Cristina y Máximo Kirchner. Se espera una nueva cumbre entre ellos, aunque desde el entorno del presidente electo aclaran que están en diálogo "todos los días, todo el día".