Las internas en Juntos por el Cambio y ya no se ocultan. Este jueves Elisa Carrió interrumpió el discurso de  la radical Brenda Austin en pleno recinto de la Cámara de Diputados, a la vista de todos y registrado por la filmación oficial del debate.

El incidente se produjo durante la especial convocada por el oficialismo para tratar el proyecto de ley de Ficha Limpia. Cambiemos no obtuvo quórum, pero sí un largo tiempo para explayarse con las expresiones en minoría que terminaron con el cruce entre Carrió y Austin. 

La líder de la Coalición Cívica llegó tarde, recordó que era su "última sesión" y admitió que se había levantado hacía poco. "Estoy un poco dormida, ¿se nota no?", dijo sacándose los lentes de sol.

Luego se explayó en recordar experiencias personales y le mandó un mensaje a sus compañeros: "para hablar de la corrupción, hay que haber enfrentado a la corrupción. En todos los gobiernos, no sólo cuando se es opositor". Y luego irritó a los radicales recordando que se fue del partido por la corrupción y machacó con el caso de las coimas en el Senado. "¡Que existieron!", remarcó.

El mensaje no cayó muy bien entre los radicales. "No nos perdamos en el repaso de las anécdotas personales y las historias de vida, volvamos al foco de esta sesión", la chicaneó Austin, que responde a Ramón Mestre, rival en al interna cordobesa de Mario Negri, íntimo de Carrió.

Esa frase no le cayó bien a Carrió, que unos minutos después se levantó y le pasó por al lado a Austin para reprochársela acercando el dedo a su nariz para que dejara de hablar, una escena violenta y registrada por las cámaras y el micrófono oficial de la Cámara de Diputados.

"No me amenace diputada, no me amenace", le dice Austin a Carrió, que le apuntaba con el dedo mientras se iba del recinto. "No te amenazo, te digo que no te olvides", retruca Lilita. "¡Dejala hablar!", se espantó la cordobesa Olga Ristra, que estaba a su lado. Diego Mestre, una banca más lejos, miraba la escena impresionado.