El triunfo de Pablo Javkin modificará significativamente el tablero del poder en la ciudad de Rosario que en los 30 años de gobierno socialista, el radicalismo participó como socio menor dentro del Frente Progresista.

A partir de ahora, la UCR encolumnada en la centro izquierda, gana terreno en el nuevo esquema de gobierno que diseña Javkin y que, aseguran, se mantendrá en estricto secreto hasta después de octubre, cuando se defina la elección nacional.

El perfil que pretende Javkin es el de un gabinete joven, con experiencia en la administración pública, respetando la paridad de género e incorporando funcionarios independientes; un organigrama variado que le ofrezca a la ciudad un perfil diferente al partido de Binner.

A pesar del hermetismo, ya asoman algunos de los jugadores de peso de esta nueva era como el flamante rector de la Universidad Nacional de Rosario, el radical Franco Bartolacci, quien ocupará un lugar destacado en el armado y de quien se espera, aporte cuadros técnicos para la gestión.

Es que Javkin tiene un partido muy chico -Creo- y Bartolacci le garantiza una estructura que le permite gobernabilidad sin tener que depender del socialismo, lo que convierte al rector en un aliado importantísimo para el intendente electo.

Aparte, la máxima autoridad de la UNR es un hábil buceador de la política y ha sabido tejer acuerdos con el peronismo y otros sectores del radicalismo para llegar al rectorado. A su asunción asistieron Lifschitz y Perotti, con sus respectivos vice, la intendenta Fein y Pablo Javkin, entre otras figuras de la política regional; toda una demostración de fuerza.

De hecho, el pasado viernes, Bartolacci reunió a intendentes y jefes comunales del sur de Santa Fe de todos los colores, desde radicales, socialistas, peronistas e independientes. Les puso a disposición la Universidad para desarrollar "una agenda de trabajo conjunta, democrática y participativa" anunció.

Franco Bartolacci con intendentes y jefes comunales del sur de Santa Fe

Por otro lado, la concejala María Eugenia Schmuck, que perdió contra la candidata del socialismo, Susana Rueda, por apenas dos mil votos, es la encargada de negociar en nombre del radicalismo en la mesa chica del nuevo intendente.

"Los radicales tenemos una sola interlocutora que es María Eugenia, no va a ser como antes que cada uno de nosotros iba a hablar con el socialismo de manera independiente sino que hay un compromiso de ser mucho más orgánicos", sostuvo un correligionario en diálogo con LPO quien pidió reserva de fuentes.

Además, la dinámica que le quiere imprimir Javkin al gobierno y la relación con sus principales socios promete ser distinta a la que tuvo el socialismo durante las 3 décadas que estuvo al frente del Palacio de los Leones.

Uno de los cambios más visibles será que con Javkin la UCR co-gobernará; "tomaremos decisiones en conjunto y no nos tendremos que enterar por los diarios del otro día", recordaron en el partido centenario con tono de reproche.

 tomaremos decisiones en conjunto y no nos tendremos que enterar por los diarios del otro día 

Por otro lado, los radicales que se fueron a Cambiemos también tendieron puentes con el nuevo mandatario y lo que proponen es volver a confluir en una fuerza de unidad no peronista, una emulación de la Alianza Santafesina que fue el antecedente al Frente Progresista en los albores de la democracia.

"Tenemos que formar un amplio espacio como lo hicieron Horacio Usandizaga, Alberto Natale y Guillermo Estévez Boero", es la proposición de Julián Galdeano, presidente provincial de la UCR que se alineó a Cambiemos en las últimas elecciones. Galdeano piensa en que es posible una convivencia entre socialistas y el PRO "sin los gurkas de uno y otro lado".

El otro sector del radicalismo, el del ministro de Seguridad, Maximiliano Pullaro, también tiene buen diálogo con Javkin y no ocultan sus expectativas aunque saben que en el sector de Schmuck le reprochan haber dividido el voto a concejales y haberla hecha perder por apenas dos mil votos.