Luego de perder la interna en Tres Arroyos con el armado del massista Pablo Garate, Cuto Moreno no quiere saber nada con que Axel Kicillof vaya de campaña a ese distrito del sudoeste bonaerense.

El Cuto es uno de los artífices de la candidatura de Kicillof, quizás la persona más cercana al candidato a la gobernación por fuera del círculo íntimo que integran Carlos ‘Carli' Bianco, Jésica Rey y Nicolás Beltram.

Sin embargo, las diferencias dentro del Frente de Todos lo llevaron a una interna en la que terminó derrotado frente al armado de Garate, un diputado provincial que responde a Sergio Massa.

En las PASO de agosto, el intendente vecinalista se impuso con 38 puntos, le siguió el Frente de Todos con 30 puntos y Cambiemos terminó en tercer lugar con 23 puntos.

Hasta ahí no hubo sorpresas, pa pulseada más interesante se dio dentro del Frente de Todos donde Alberto Ismael -el candidato que promovió el Cuto Moreno- perdió lejos frente a Mercedes Moreno, la candidata de Garate. La diferencia fue contundente: 70 a 30.

Sabiéndose derrotado, ahora el Cuto busca evitar que Kicillof vaya a Tres Arroyos y se muestre junto al peronismo rival. Según trascendió estaba confirmada una visita del candidato a la gobernación para el 17 de septiembre, una actividad que parece fue suspendida.

Desde el entorno de Kicillof niegan que esa visita haya estado prevista. Aseguran que las giras por el interior son jueves y viernes y que lunes, martes y miércoles hacen reuniones y visitas a distritos más cercanos.

Es que la derrota del Cuto sorprendió en Tres Arroyos donde esperaban una definición más reñida. El diputado fue una de las personas de máxima confianza de Néstor Kirchner, incluso la ex presidenta lo recordó en mayo cuando presentó su libro en La Rural. El motivo de mencionarlo fue que el Cuto estuvo en el casamiento de Néstor y Cristina, en 1975.

Pese a su poder durante los años kirchneristas, Moreno nunca pudo tener el control de su pago chico, aunque sí encontró espacios para tejer vínculos con la obra pública.

El actual intendente, Carlos Sánchez, llegó al poder en 2003 y desde entonces controla ese punto del sudoeste bonaerense lejos del peronismo y de Cambiemos. Su herramienta es el vecinalismo una fuerza que tuvo varios referentes en esa región de la provincia.

El enfrentamiento entre el Cuto y Sánchez tuvo momentos coloridos. En 2015 el diputado peronista lo había enfrentado por dar la espalda al peronismo en 2015 y aseguró por los medios que sólo si era Superman iba a poder "seguir con las obras en Tres Arroyos". Pese a la derrota del kirchnerismo en esa elección, Sánchez se impuso sin problemas y apareció disfrazado se Superman.