Martín Insaurralde se muestra preocupado por la crisis económica, aunque se apura a descartar un estallido social en el conurbano bonaerense. "Aprendimos que en la Argentina el caos no le sirve a nadie", dice a LPO el intendente de Lomas de Zamora.

Sin fe en las próximas decisiones de Mauricio Macri y María Eugenia Vidal -cree que ninguno reacciona y cambia el rumbo-, pide que "Dios los ilumine para terminar de la mejor manera posible". Elogia a Axel Kicillof y confía en que la solución vendrá de la mano de Alberto Fernández, que encabezará un gobierno "superador" al de Cristina Kirchner.

¿En qué condiciones cree que llegará Macri a octubre después de la crisis que estamos atravesando?

Este es un momento difícil de la Argentina. El peronismo de la provincia de Buenos Aires lo venía reflejando desde el 11 de diciembre de 2015, que este no era el camino. Era un camino de ajuste, de que el Estado no intervenga en las políticas económicas de la Argentina... lo que se precipitó tiene que ver con una de las pocas cosas que cumplió Macri. Él dijo que quería hacerlo y más rápido, lo está logrando. Está deteriorando el salario, aumentando la desocupación y la indigencia. Es un momento difícil donde todos debemos tener responsabilidad. La primera es transmitirle a la gente que nosotros ratificamos las mismas cosas que dijimos antes de ganar las elecciones. No estamos de acuerdo con las políticas del FMI, el ajuste, nunca creímos que el Fondo era bueno, que alguien venía a enamorarnos... 

Le dijimos al Presidente y la gobernadora que no era por ahí. Creemos en una argentina productiva, en el consumo interno, en la política de las pymes que se la han olvidado, todos los días cierran comercios en Lomas, Matanza, Echeverría... cada hora hay despidos en la argentina. No era el camino, lamentablemente se precipitó después de las elecciones porque las políticas de ellos siguen siendo las mismas, es ajustar. Lo que deseo es que termine de hacer el menor daño posible de cara al 10 de diciembre y construir una nueva esperanza con Alberto en la presidencia y Axel en la Provincia.

¿Cómo percibe la situación social en uno de los lugares más castigados como el sur del Conurbano?

Está muy difícil pero contenido por el gran rol que hoy tenemos los intendentes. Tenemos una red social que está dando una contención, se multiplicó por diez, antes se decía "la ayuda se multiplicó por dos, por tres..." ahora acumula diez. Es preocupante y alarmante porque queda un tejido social muy roto, muchos argentinos que pasaron de la pobreza a la indigencia, de la clase media a la pobreza. Muchos perdieron el trabajo. Nuestros comedores antes iban a comer cierta cantidad de chicos, después se sumaron los hermanos, hoy en este horario de las 6 o 7 de la tarde se cocina para la cena y vienen familias a llevársela, en muchos casos es su única comida diaria. Queremos que esto cambie lo más rápido posible. Hay que meterle plata en el bolsillo a la gente, generar expectativas, nuevos empleos, nuevas formas de pensar la Argentina, que es la que piensa el Frente de Todos.

No veo un estallido social. En la Argentina el caos no le sirve a nadie, más allá de la gran necesidad y el grito de hambre que hay en muchísimos lugares, la sociedad prendió, maduró.

¿No ve posibilidad de un estallido social?

No, no, no. Mirá que han hecho las cosas mal pero creo dos cuestiones. Una, el gran trabajo de articulación de los municipios, de cualquier color político, cuando el Estado provincial y nacional comenzaron a tener una matriz de ajuste, tarifazo y endeudamiento, los intendentes volcaron sus recursos a la política social. Y dos, creo que la sociedad aprendió, maduró. En la Argentina el caos no le sirve a nadie, más allá de la gran necesidad y grito de hambre que hay en muchísimos lugares, no sólo en el Conurbano sino en muchas provincias, uno habla con gobernadores y hay lugares muy difíciles.... pero la verdad es que nació una gran esperanza. 

¿Cree que Alberto Fernández podrá dar respuesta a esa esperanza?

Alberto tendrá un desafío enorme que tendrá que ver con mejorar la calidad de vida de los argentinos, poner la esperanza adelante, generar empleo, volver a estabilizar la macro, pero principalmente terminar con esta grieta. Culturalmente ese tejido está roto y ahí es donde Alberto va a apuntar. Ya normalizamos que no invitamos a un vecino, amigo o pariente a una reunión porque piensan distinto, se pelean entre sí, naturalizamos eso. El gran desafío es reencontrar a la familia argentina, a la democracia. Que uno pueda ser radical, peronista, de Cambiemos, kirchnerista, pero que todos puedan comer un asado el domingo y discutir. El lunes todos juntos trabajar para construir una gran Argentina.

Los intendentes dicen que Vidal no les atiende el teléfono, que está encerrada. Usted tenía una buena relación con ella, ¿habló desde las PASO?

No hablé con ella después de la elección, es un momento difícil y el gobierno no reacciona, ninguna de las políticas que tomó la gobernadora y el presidente tienen que ver con poner plata en el bolsillo de los trabajadores. Ahí es donde está el no escuchar. Todas las medidas que se están tomando, que tienen que ver con cuestiones macroeconómicas, no le cambian nada al remisero, al taxista, al comerciante. Ahí es donde el Gobierno debe escuchar, estar atento. Yo sueño con eso, que lleguen de la mejor manera posible, todos los hombres y mujeres de bien que hacemos política queremos eso.

LPOMarcelo Arias

¿Qué pasó con Vidal, que era la "leona", la dirigente con mejor imagen del país, y termina perdiendo por casi 20 puntos?

El hecho de Vidal tiene que ver primero con una gran expectativa que tenían los bonaerenses de una dirigenta que dijo que los venía a defender. Me parece que la sumatoria de buenas voluntades o buenos deseos no se condicen realmente con los hechos. Ahora se votó la gestión, se evaluaron los cuatro años de Vidal, más allá de que Axel recorrió toda la Provincia y despertó en muchos vecinos una expectativa de resolver problemas estructurales. Pero en estos cuatro años los números de ninguno de los índices fueron mejorados. Se votó esa realidad, la gente votó cuatro años de gestión. Son suficientes para cambiar algún índice para una provincia tan compleja.

El gobierno de Vidal hace la lectura de que hicieron obras estructurales que el peronismo no hacía hace 30 años, como cloacas, rutas...

Es cien por ciento mentira. Primero, es un eslogan muy lindo "hicimos cloacas donde antes no había". Hermoso, menos mal que no las hicieron donde había porque sería un mal desempeño de funcionario público. Yo la vi esa campaña y la verdad que es muy buena campaña. La gente es muy inteligente, nosotros en Lomas hicimos el doble de cloacas que en el mismo período de Vidal y Macri. Lo que pasa es que se crean campañas de marketing que tienen que ver con que se hicieron cloacas. Claro que se hicieron, la mitad que se hicieron en el gobierno anterior en la misma cantidad de tiempo. Pongo el ejemplo de Lomas pero podría poner de toda la provincia porque la conozco. En Lomas se inauguró la planta de tratamiento de residuos cloacales para 380 mil habitantes. No conectamos uno. La comenzamos nosotros en la gestión anterior, se terminó con Macri en 2017. Todavía no se conectó un solo vecino de Lomas.

Es un eslogan muy lindo "hicimos cloacas donde antes no había". Hermoso, menos mal que no las hicieron donde había porque sería un mal desempeño de funcionario público. Yo la vi esa campaña y la verdad que es muy buena campaña. Nosotros en Lomas hicimos el doble de cloacas que en el mismo período de Vidal y Macri. 

¿Por qué no se conectó a ningún vecino a esa planta?

Porque no avanzaron en seguir invirtiendo. En 2017 la inversión en obra pública se acabó. Se terminó lo que quedaba y muchas obras quedaron inconclusas. El Puente La Noria que Lomas inauguró con el Presidente, una obra que había comenzado el gobierno anterior, se terminó en 2017. Se inauguró el paso por arriba, se cortó la luz y hoy vas y pasás por ese puente y sigue sin luz, desde hace 9 meses. El paso por abajo de la obra fue vandalizado. Y bueno, con un endeudamiento de 107 mil millones alguna obra tuvieron que hacer.

LPOMarcelo Arias

O sea que dice que es falso que Vidal pierde porque Macri la tiró para abajo y no la dejaron desdoblar.

Vidal pierde porque no defendió a los bonaerenses. Habrá muchas evaluaciones pero principalmente tiene que ver con que si vos compartís, ayudás y acompañás las políticas de ajuste y no crees en el Estado, si crees que las tarifas a cualquier precio lo tengan que pagar los bonaerenses y cada vez que te toca discutir recursos acompañás las políticas macroeconómicas del Presidente, es imposible ganar. La provincia cuando consiguió la primera parte del Fondo del Conurbano consigue 20 mil millones y le devuelven un gasto de 25 mil millones del subsidio del transporte, 23 mil millones de Aysa, 12 mil millones de Edesur y 15 mil millones de Edenor.

¿Qué esperan los intendentes para el primer año de una gestión de Kicillof? ¿Dónde quieren que ponga el foco?

Axel hacia los intendentes abre dos cuestiones. Primero, una gran sorpresa porque se interiorizó en trabajar en conjunto, en preguntarnos a cada uno cuál era la realidad, nuestra visión de los distritos y de la provincia. Segundo, encarna una gran esperanza con el trabajo que hace cotidianamente. Lo veo obsesivo por el trabajo, por la eficacia y eficiencia de los recursos y por planificar.

Más allá de lo que tenga pensado, por nuestras conversaciones veo que tiene claro la prioridad de la Provincia debe ser reconvertirla en productiva, generadora de empleo y recursos. Para eso tiene que haber un programa de políticas de Estado a corto, mediano y largo plazo. Por supuesto que en lo macro deberá ser ayudado por el Gobierno nacional, pero Axel piensa en una Provincia competitiva, que pueda producir y autoabastecerse en muchas cosas. El camino de producción y el empleo va a ser enfocado por Axel con distintas cuestiones que tengan que ver con las pymes, agro e industria.

¿Qué espacios les gustaría ocupar a los intendentes en su próximo gobierno? Se habló de que negociaron lugares concretos como dos ministerios.

Nosotros estamos contentos donde estamos, sino no nos hubiéramos presentado. En mi caso y en el de la mayoría de los intendentes que conozco, estamos bien en los lugares en los que fuimos elegidos. lo que creo es que vamos a ayudar en lo que Axel nos necesite, él es quien conduce los destinos de la Provincia y de los más de cien intendentes que tendrá el Frente de Todos cuando se ratifique y amplíe el triunfo en la elección en octubre. Seremos sus auxiliares, en la medida que nos necesite.

En mi caso y en el de la mayoría de los intendentes que conozco, estamos bien en los lugares en los que fuimos elegidos. Lo que creo es que vamos a ayudar en lo que Axel nos necesite, él es quien conduce los destinos de las provincia. 

¿Cómo ve esta situación que genera tanta intriga de la fórmula Alberto-Cristina, donde la vice es una líder política con un caudal de votos muy fuerte? ¿Cómo va a funcionar?

Yo creo que va a funcionar muy bien, no sólo porque lo escuché a Alberto contarlo -las charlas que tienen, el trato, el cariño, el reencuentro después de sus peleas-, sino que a Cristina la conozco hace muchísimos años y en 2017 cuando nos hablaba de esa gran unidad y construcción de un gran frente, todavía algunos pensábamos que era imposible llegar. Pero ella, con su generosidad, con su carácter y su pensamiento estratégico sabía que ese era el camino. Me acuerdo distintas notas con periodistas, por ejemplo cuando le dijo a Novaresio que "si yo tengo que no ser presidenta para que eso ocurra, lo voy a hacer" y muchos no creyeron esa posibilidad. No sólo se concretó sino que eligió a un hombre que ella sabe que no se lo convence con una mentira, que no se lo convence con intereses individuales. Creen en la Argentina que pueden construir, coinciden en la Argentina productiva, abierta al mundo pero con inteligencia, no arrodillada a los pies de quienes vengan a quedarse con el trabajo de los argentinos. Van a ser un complemento.

LPOMarcelo Arias

¿Pero cree que Alberto podrá ejercer la presidencia en plenitud?

La Argentina es un país presidencialista, el que se sienta en el Sillón de Rivadavia conduce los destinos del país y confiando en lo que dijo Alberto, que tienen una relación de amistad y en la experiencia de Cristina de haber sido ocho años presidenta, con todos sus aciertos y reconociendo errores, creo que va a ser un gobierno superador. Teniendo en cuenta que todo lo que aprendimos para ser mejores van a haber que aplicarlo ahora con esa gran responsabilidad porque está sufriendo la gran mayoría de los argentinos.

¿Y Massa cómo encaja en este nuevo mosaico?

En esta nueva composición, tanto Sergio, Alberto, los sindicatos, las organizaciones sociales, todos entendieron que debíamos estar juntos. Cristina fue la artífice de esto pero todos son importantes. Todos han dado muestras de que este modelo de ajuste, de hambre y tarifazos no podía seguir en la Argentina. No había forma de que las diferencias metodológicas o personales que teníamos entre dirigentes era una etapa de un mal recuerdo, errores de un pasado y que había que construir un futuro con los aciertos. Massa es de las personas que acertó, cree en esta nueva construcción. Yo nunca dejé de tener relación con él, hasta cuando me tocó ser su contrincante por decisión suya en 2013, siempre tuvimos relación y hoy estoy feliz de que Sergio, todo el Frente Renovador y la enorme mayoría del peronismo bonaerense estemos en la Provincia trabajando juntos.

El primer acuerdo era unirse para sacar a Macri. Una vez que eso pasa, los referentes económicos que representan a Alberto, como Nielsen, no parecen tener grandes coincidencias con el núcleo duro de Cristina. ¿Esto no generará rispideces cuando arranque la nueva gestión?

No, al contrario. Creo que el antes y el después de todas esas respuestas, que hay un montón de preguntas, tienen que ver con que la síntesis es Alberto Fernández. De todas esas contradicciones, dificultades, errores que hemos cometido. Alberto fue muy crítico del segundo mandato de Cristina. Creo que Cristina encontró en Alberto la síntesis para reconstruir lo que viene. Identificó errores, aciertos, personalidades.... Fue muy claro Alberto cuando contó esa charla íntima en la que ella le propone que sea candidato, cuando le dijo: "Yo vengo a aportar este gran caudal de votos, pero la mayoría la debés construir vos". Me parece que ese es el camino, es el camino que se dio. Cristina tenía razón: Alberto podía construir esa mayoría, tenía que traer a Massa, tenía que traer a las organizaciones sociales y a los distintos partidos que se incorporaron en la Provincia. Yo estoy feliz con las decisiones que hemos tomado entre todos, cada uno con nuestra responsabilidad. Y ahora tenemos una doble responsabilidad: primero haber ganado y segundo que las dos terceras partes de la Argentina le dijeron "basta" a este modelo de exclusión.

Las tres experiencias de gobiernos no peronistas terminaron muy mal. ¿Qué reflexión le genera eso?

Termina mal cuando vos te alejás de la gente. Termina mal y empieza mal de la misma manera. Hoy parece que termina mal, ¿qué diferencia hay de este año de gobierno con el primero? que tardaron cuatro años en empobrecer a 4 millones de argentinos, pero la política es la misma, las decisiones que tomaron en diciembre de 2015 son las mismas del 12 de agosto de 2019. Por eso más que como termina, prefiero pensar en lo que se viene, una gran coalición que le viene a aportar una gran esperanza a los argentinos. Tiene que ser entre todos, no nos alcanza con lo que hemos conseguido, con los que estamos involucrados, me parece que esta gran apertura de Alberto hacia todos los gobernadores, intendentes, le dará ese motor para construir la Argentina que nos merecemos de una vez por todas.

Y lo que se viene respecto a la futura oposición, ¿seguirá existiendo Cambiemos? ¿Dónde imagina a Macri, Vidal y Larreta?

Yo lo que pienso de lo que hoy es todavía el oficialismo es lo que dije antes: que Dios los ilumine y terminen de la mejor manera posible, por el bien de los argentinos.