Pablo Iglesias intentó tomar las riendas de la negociación de Gobierno lanzando una propuesta que Pedro Sánchez rechazó de inmediato. Unidas Podemos envió este martes un documento donde ofrecía cuatro opciones de coalición; en todas ellas reclamaba una vicepresidencia con competencias y tres ministerios. La respuesta del PSOE no se hizo esperar. Los socialistas tacharon de "inviable" la oferta y criticaron que Podemos insista en conformar una coalición, luego que esa opción fuera descartada tras la investidura fallida del pasado julio.

En Podemos criticaron a Sánchez por retrasar las negociaciones de Gobierno hasta poco antes de la investidura. Mientras, Sánchez justifica esta inacción en la ronda de reuniones que mantiene con organizaciones de la sociedad civil. Unos encuentros supuestamente dirigidos a elaborar un programa de gobierno para pactar luego con Pablo Iglesias. La opción de compartir Consejo de Ministros queda así descartada para el presidente, que sólo contempla un Gobierno en solitario.

El plan de Sánchez para gobernar en solitario amenaza a Iglesias con una nueva crisis interna

Pero Iglesias rechaza esa vía. En Podemos ya salieron voces pidiendo rebajar las exigencias y el plan de Sánchez para gobernar en solitario amenaza al dirigente con una nueva crisis interna. El coste de rechazar de nuevo la investidura y provocar una repetición electoral saldría muy caro en las urnas para un partido que ya perdió un 40% de sus diputados nacionales. Para evitar ese extremo, el líder de Podemos volvió a abrir el debate de la coalición, en un intento por ganar tiempo y presionar a los socialistas.

El PSOE zanjó rápidamente la oferta para evitar la reapertura del debate sobre la coalición, sobre el que Sánchez ya parece tener una decisión tomada. "Es inviable la fórmula de coalición. Debemos explorar otros modelos de gobernabilidad", afirmó el PSOE a través de su cuenta de Twitter. En la respuesta difundida, los socialistas insisten en que la fórmula de coalición se demostró "inviable" el pasado julio por tres razones.

El presidente de España, Pedro Sánchez, en la sede del PSOE.

PSOE

La primera es la estructura de Gobierno, para la que el PSOE apuesta por una fórmula monocolor "que evite la existencia real de dos gobiernos". El segundo de los motivos que alega son las "importantes diferencias en cuestiones de Estado" como el conflicto catalán, donde Podemos siempre defendió un referéndum de autodeterminación, pese a que Iglesias ya renunció a ese camino en las pasadas negociaciones de julio. Pro último, el partido de Sánchez insiste en hablar de la "desconfianza" que se acrecentó entre ambas formaciones tras la investidura fallida.

Sánchez decidió así permanecer impermeable a los movimientos de Podemos y continuar su hoja de ruta: hasta final de mes reuniones con colectivos sociales para luego presentar un programa de gobierno para debatir con Iglesias, aunque éste ya dejó claro que no aceptaría otra cosa que la coalición. Es decir, todo sugiere que el presidente se ha decantado por forzar la convocatoria a nuevas elecciones o la rendición incondicional de Podemos.