El Gobierno aceptará aprobar la ley de góndolas que presentó Elisa Carrió pero propuso una versión más moderada e intentará convencer a la oposición para aprobarla cuanto antes.
"No hay muchos modelos de esta legislación en el mundo, lo que implica un desafÃo importante", sostuvo el diputado del PRO Daniel Lipovetzky, durante un plenario de comisiones que no tuvo quórum, como habÃa adelantado LPO.
Las campañas electorales en las provincias y los actos en homenaje a Eva Perón menguaron la presencia opositora, pero tampoco hubo muchos oficialistas presentes.
El plenario lo encabezó la massista Marcela Passo, presidente de la comisión de defensa del consumidor y autora de uno de los proyectos. También hay otros del kirchnerista Juan Cabandié y el mendocino José Luis Ramón, del Partido Intransigente, que tomó un texto de Juan Grabois, ignorado por sus aliados del Frente para la Victoria.
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Lipovetzky acercó un texto que a diferencia de los demás, no limita la cantidad de productos de una misma marca en cada góndola. Carrió habÃa pedido un máximo del 20% y Cabandié de 15%, pero en la casa Rosada no quieren números y prefieren establecer un mÃnimo de 3 proveedores y aplicar penas severas, de hasta 1% de la facturación.
Mucho menos acuerdo hay para colocar productos de cooperativas populares en las góndolas, una exigencia de Grabois que para el macrismo "es poco seria".
"Si no establecemos porcentajes la ley será un compendio de buenas intenciones que no servirá para nada. Carrió coincide y se van a tener que poner de acuerdo entre ellos", advirtió a LPO uno de los opositores que negocia el proyecto.
El próximo plenario está convocado para el martes a la mañana y si se logra dictamen la ley podrÃa ser aprobada en la sesión prevista para el dÃa siguiente, pero sino se demorará hasta comienzos de junio. La negociación no está nada fácil.
