En el Gobierno descartan que Mauricio Macri vaya a hacer cambios de gabinete luego de que se disparara el riesgo país al máximo de la era Cambiemos y se despegaron de los excesos de Elisa Carrió.

El Gobierno vivió uno de sus peores días del año por el día negro en el mercado que se combinó con las insistentes presiones del círculo rojo contra la candidatura de Macri y los indicios de una cada vez más firme postulación de Cristina Kirchner.

Candidato en riesgo

Sin embargo, en la Rosada no quieren tocar las piezas. En parte porque el ingreso al gabinete en estas horas no es un escenario tentador para nadie y también porque la desconfianza del mercado ya no es con un ministro en especial sino con el propio presidente.

De todos modos, en las últimas semanas el principal señalado para salir del gabinete había sido el ministro de Producción, Dante Sica.

Los indicios de Cristina candidata y las presiones para que se baje Macri aceleran la crisis en el mercado

El otro problema que analizaron en la Rosada en las últimas horas es el de Carrió. Lilita derrapó al agradecerle a Dios por la muerte de José Manuel de la Sota y ni siquiera se disculpó seriamente. En el Gobierno creen que cada exabrupto de la chaqueña le resta a la marca Cambiemos y pese a que no salieron a callarla decidieron despegarse.

El ministro del Interior, Rogelio Frigerio, llamó este miércoles a Candelaria de la Sota, la hija del ex gobernador, para disculparse por las palabras de Carrió y la invitó a la Rosada.

"Me pareció importante sumarme a las disculpas públicas de la diputada Carrió, correspondía llamar a las hijas", aseguró Frigerio en diálogo con LT28 de Rafaela, Santa Fe. En tanto, aseguró que este episodio no divide a Cambiemos sino que el espacio "está más fuerte que nunca, trabajando en conjunto" y en ese sentido destacó que "Lilita participó desde la Coalición Cívica del trabajo" para que las medidas anunciadas la semana pasada por el Gobierno nacional "pudieran implementarse en este momento tan difícil".