El cruce de la barrera psicológica de los $40 potenció la demanda de dólares y el tipo de cambio anotó su sexta alza consecutiva, con un importante incremento de más de un peso para cotizar a $41,40.

Como explicó LPO, el repentino salto del billete de los últimos días se produce por el traspaso masivo de plazos fijos a la moneda estadounidense, luego del derrumbe de la tasa de interés y los nuevos indicadores inflacionarios.

El dólar superó los $40 por primera vez desde la corrida de septiembre

Sucede que a medida que llegaban los vencimientos de los ahorristas, veían como su tasa real quedaba al borde de pasar a arrojar pérdidas con una expectativa de inflación que no para de subir.

Este mismo movimiento se observa en la tasa Leliq, que tras descender más de 15 puntos porcentuales durante el 2019, ya está buscando un equilibrio al alza para poder renovar los altísimos vencimientos que debe afrontar cada día en miras de sobrecumplir con las metas de agregados monetarios.

Se confirma el repunte inflacionario y estiman que podría rozar el 4% en febrero

Pero a su vez, la situación se vuelve mucho más confusa con el último anuncio de Morgan Stanley, que afirma que Argentina permanecerá en la categoría "emergente-frontera", ya que la fuerte devaluación del 2018 desplomó el PBI per cápita en dólares del país.

De todas formas, la confirmación recién llegaría en mayo y eso no evitaría el ascenso a emergente como se especuló, sino que el país cotizaría en ambos índices.

No obstante, eso no evitó la preocupación de los mercados, que mostraron un alza del riesgo país nuevamente por encima de los 700 puntos y la consecuente baja de los bonos como el Dica (-0,92%) o el Century (-0,6%).

 Ante este escenario, el Banco Central salió a intervenir en el mercado de futuros y concedió una mayor tasa en la tradicional subasta de Leliq. En la misma, adjudicó unos $212.661 millones a un promedio de corte de 46,01%, que implica una suba de 153 puntos básicos respecto a la jornada anterior.

Así, la máxima autoridad monetaria logró controlar la desesperación inicial y la divisa se retrotrajo hasta cerrar a $40,71 en el promedio minorista. En el segmento mayorista, por su parte, terminó operando a $39,67, alejándose definitivamente del piso de la banda que supo perforar durante todo enero.