La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, alimentó las especulaciones respecto a una posible candidatura a vicepresidente de Mauricio Macri en las elecciones de octubre. "Estoy a disposición de lo que decida el presidente", afirmó la funcionaria que ganó protagonismo con el discurso de mano dura que adoptó el Gobierno.

"Estoy muy sorprendida que haya salido un tema así cuando nadie me dijo nada, ni el Presidente ni nadie del Gabinete, ni absolutamente nadie me lo comentó, y de golpe empezó a surgir el comentario", afirmó Bullrich durante una entrevista en TN. "Por un lado siento que en el lugar donde estoy, como ministra de Seguridad, falta mucho para hacer, muchísimo y cuando uno deja una gestión en un primer término, quiere seguirla", pareció despegarse, aunque luego se autopostuló. 

"Por otro lado las decisiones que tome el Presidente tendrán que ver con qué perfil es mejor para Cambiemos. En ese sentido, estoy a disposición, no puedo decir que no. Tampoco estoy diciendo ‘sí, me gustaría', estoy a disposición de lo que el Presidente decida", afirmó la ministra, que aclaró que se trata de un "chisme".

Pero la declaración de Bullrich no hace otra cosa que darle más vuelo a las especulaciones y revela su propio interés en ser vice. En las últimas horas, uno de sus principales colaboradores, Gerardo Milman, ya había salido a alimentar los rumores. "Si el presidente se lo ofreciera, no tendría problema en acompañarlo", declaró el jefe de Gabinete del Ministerio de Seguridad.

El Gobierno refuerza el discurso de mano dura y Patricia vuelve a posicionarse como vice

Patricia escaló posiciones como posible acompañante de Macri en la fórmula de Cambiemos a partir de la estrategia del Gobierno de reforzar el discurso de mano dura para concentrar la agenda en un tema menos incómodo que la inflación, los tarifazos o la recesión. 

En las últimas semanas, la Rosada se concentró en lanzar propuestas polémicas como la baja de la edad de imputabilidad, la compra de pistolas Taser, la expulsión de extranjeros o la doctrina Chocobar, todas medidas que ubican a Bullrich en el centro de la escena y como la figura central del oficialismo en el comienzo del año electoral.

La posible candidatura de la ministra de Seguridad surgió a partir del éxito en los operativos de la cumbre del G20 que el Gobierno buscó exprimir lo máximo posible en medio de las malas noticias de la economía. El propio Macri elogió a Bullrich en público y alentó los rumores. Todo esto en medio de un giro a la derecha del oficialismo, en línea con fenómenos internacionales como el de Jair Bolsonaro en Brasil.

El discurso de mano dura parece una estrategia que apuesta a conservar el voto propio. Como explicó LPO, Bullrich tiene muy buenos niveles de aceptación entre los votantes de Cambiemos y, si bien los analistas creen que el giro a la derecha no le suma a Macri más allá de su núcleo duro, evita fuga de votos a expresiones outsiders como el salteño Olmedo.