La declaración del testigo "estrella" en la Corte Federal de Distrito en Brooklyn cimbró al sistema político de México en los últimos días. Ya todos habían observado con asombro como el abogado del Chapo aseguró sin sutileza que Joaquín Guzmán Loera había pagados sobornos a Enrique Peña Nieto y Felipe Calderón, acusación que desde luego fue desmentida por los voceros de ambos mandatarios.

Pero este lunes, Jesús "El Rey" Zambada, hermano del mítico "Mayo" y líder de los negocios del Cártel de Sinaloa en la Ciudad de México, relató los planes frustrados Guzmán Lorera para matar a José Luis Vasconcelos, "un alto mando de la Procuraduría General de la República (...) que no colabora con nadie y no acepta dinero de la droga".

Vasconcelos fue subprocurador de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada de la Procuraduría General de la República (PGR), y mano derecha de Juan Camilo Mouriño, el Secretario de Gobernación de Felipe Calderón, que falleció en un accidente aéreo que siempre dejó suspicacias. Se trató del famoso "avionazo" que se estrelló sobre la avenida Reforma.

Durante casi cuatro horas, en su tercer día de testimonio, Zambada relató varios intentos de venganza y asesinatos cometidos presuntamente por el capo, acusado de traficar más de 155 toneladas de cocaína a Estados Unidos durante 25 años y que puede ser condenado a prisión de por vida si es hallado culpable.

El Chapo afirmó que el cártel de Sinaloa sobornó a Peña Nieto y a Felipe Calderón

Zambada destacó que el intento de asesinato de Vasconcelos sucedió en 2005. Según sus dichos, su misión era localizar a Santiago Vasconcelos, pero luego de hacerlo decidió no participar en la operación, debido a que implicaría matar también a muchos civiles y personas inocentes. "No me parecía correcto", dijo.

Expresó que Juan José Esparragoza, El Azul, otro alto cargo dentro de la organización, le permitió salir de la operación. Más tarde, se enteró que Nacho Coronel -también directivo del cártel- había enviado sicarios a la Ciudad de México para matar a Santiago Vasconcelos, pero refirió que estos asesinos fueron detenidos. Vasconcelos, a fin de cuentas, murió en el avionazo de 2008. Desde luego, su relato vuelva a instalar la idea de un posible atentado alrededor de ese episodio trágico de la historia política contemporánea de México.

Los señalamientos de "El Rey" Zambada García movilizaron también al establishment político de la Ciudad de México, al admitir que estaba a cargo de los negocios en el DF, dando por tierra con los dichos de Miguel Ángel Mancera, que sistemáticamente negó la presencia del crimen organizado en la Ciudad.

"El Rey" aseguró que se repartían cerca de 300 mil dólares mensuales entre funcionarios capitalinos, entre los que habría incluido al titular de la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad. Claro, no se especifica a qué años se refiere, con lo cual nadie salió aún a desmentirlo.

En los equipos de Mancera recuerdan que "El Rey" fue capturado y extraditado a los Estados Unidos en 2008, justo el año donde el último Jefe de Gobierno recién tomaba posesión como Procurador. "Su declaración se refiere a antes de ese año", afirmaron.

Como sea, la acusación todavía no incluyó nombres de funcionarios específicos, pero si reflejó cierta "comodidad" para moverse en el terreno capitalino. Contó, por ejemplo, cómo conoció al Chapo tras su primera huida de prisión en 2001 y cómo junto a su hermano le ayudó a escapar cuando poco después estuvo a punto de ser capturado en una operación militar.

Según dijo, Zambada García consiguió un lugar para poder hacer aterrizar un helicóptero y extraer a Guzmán antes de que fuese apresado. La policía incluso escoltó al Chapo en el entonces Distrito Federal cuando huía en automóvil con el Rey tras su primera fuga de prisión.