El auto de procesamiento dictado por el juez federal Claudio Bonadio, revela el manejo de fondos del kirchnerismo durante las últimas campañas y desnuda el rol de algunos referentes del Conurbano que hoy ocupan lugares importantes dentro de Cambiemos.

Es el caso de la familia Ivoskus que tiene al diputado provincial Daniel Ivoskus en la bancada oficialista y a su padre el ex intendente Ricardo Ivoskus, nombrado por María Eugenia Vidal en el directorio del Banco Provincia. Sin precisar a cual de los dos se refería, José López, uno de los ex funcionarios arrepentidos en la causa de los cuadernos, acusa que "Ivoskus" le pidió 5 millones de pesos para enfrentar a Sergio Massa en San Martín.

En el escrito de Bonadio, la declaración de López -ex secretario de Obras Públicas durante los 12 años de gobierno kirchenrista- asoma como una de las pruebas que más comprometen a Cristina Kirchner.

López despliega una extensa explicación del mecanismo de corrupción montado por Néstor Kirchner para financiar la campaña de 2007. Según afirma, luego de la muerte del ex presidente -en 2010- se frenó el sistema de recaudación que funcionó desde 2003.

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En el invierno de 2011, el ministro de Planificación, Julio de Vido, le da la orden de retomar la recaudación para la campaña de 2011 y le indicó que el contacto era Roberto Baratta. "El esquema era hablar con De Vido y Chequear con Baratta", cuenta López.

El funcionario, detenido en 2016 mientras intentaba ocultar bolsos con casi 9 millones de dólares en un monasterio de General Rodríguez, recordó que en 2013 aparece Sergio Massa en la escena electoral a quien calificó como un condimento nuevo en la campaña. La orden que recibió López fue de "darle respaldo" a los partidos que no jugaban con el Frente para la Victoria, es decir que eran quienes les podían sacar votos a Massa.

Según el escrito, De Vido y Baratta le explican a López que quien concentrará la recaudación será el entonces jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, a quien ponen a cargo como coordinador de la campaña.

Según recuerda López, le consultó a Cristina y la entonces presidenta le dijo que había "que poner todo para ganarle a ese traidor (en referencia a Massa)".

En ese momento, López cobra participación en el armado político en el Conurbano, coordinando las agrupaciones que le podían robar votos al líder del Frente Renovador.

El ex funcionario asegura que mantuvo contactos con "Ivoskus", en la casa del "Japonés" García, histórico dirigente de la vecina localidad de Vicente López. "Ivoskus me dijo que teníamos que resolver un tema logístico y me dijo que necesitaba 5 millones de pesos", dice en su declaración.

"No fui yo fue mi padre Ricardo, el que asistió a esa reunión de ex intendentes. Pero no se avanzó, la decisión fue no sumarse al Frente para la Victoria con colectora y fuimos a un frente con Stolbizer", explicó Daniel Ivoskus a LPO.

Macri, Vidal y Michetti con Ricardo Ivoskus en la campaña del 2015.

Por entonces, los Ivoskus eran dueños del sello del partido Honestidad y Trabajo al que sumó al Frente Progresista Cívico y Social, conformado por el FAP, la UCR, el GEN y el Movimiento Libres del Sur.

López agrega que dentro del listado de empresarios se seleccionó uno para que le pagara los 5 millones que Ivoskus necesitaba.

Pese a esos fondos, la misión que tenía Ivoskus de desgastar a Sergio Massa en San Martín fracasó. La lista de Gabriel Katopodis se impuso con casi el 50% de los votos. Más abajo quedó el Frente para la Victoria (con el 25%) y en tercer lugar el Frente Progresista Cívico y Social con 13%. Sin embargo, Ivoskus -ayudado con fondos de la obra pública- llegó a ser concejal toda vez que ocupaba el primer lugar en la lista.

En 2015, los Ivoskus se pasaron a Cambiemos a través de una alianza que tejieron con Jorge Macri. Esto derivó en que Daniel Ivoskus fue como candidato a diputado provincial y entró. Y su padre Ricardo como candidato a intendente por el macrismo y perdió con Katopodis que fue reelecto.