El temor a una intervención judicial hizo que el congreso del PJ postergara las elecciones previstas para el 12 de agosto. La conducción del partido, encabezada por Víctor Santa María, pretendía además modificar la Carta Orgánica para que las autoridades del peronismo capitalino se eligieran de forma indirecta.

La semana pasada hubo reunión del Consejo del PJ y allí se decidió llamar al Congreso Metropolitano, que preside el camporista Mariano Recalde, para tratar "por única vez" la reforma de la Carta Orgánica partidaria. Las autoridades del peronismo de la Ciudad tienen sus mandatos prorrogados desde hace más de un año y medio.

El ex Secretario de Comercio Guillermo Moreno fue uno de los afiliados que decidió impugnar la eventual decisión del Congreso. La intervención del PJ nacional ordenada por la jueza María Romilda Servini fue un antecedente que los máximos referentes del justicialismo de la Ciudad tuvieron muy en cuenta a la hora de decidir.

"Nos opusimos a los cambios de la elección directa de los afiliados para esta interna, nos parecía que era un cambio de reglas de juego intempestivo", dijeron desde el sector que conduce el otrora agregado económico de la embajada argentina en Italia.

El Congreso ni siquiera trató las modificaciones a la Carta Orgánica y tampoco los tiempos electorales. Los comicios se habían fijado para la primer quincena de agosto pero no se realizarán antes de fines de septiembre, aunque la fecha podría extenderse hasta principios de octubre.

En el congreso estuvieron la mayoría de sus 181 miembros: hubo integrantes de La Cámpora, del sector de Santa María, del que lidera Juan Manuel Olmos y un cuarto que tiene como referente al secretario General de UPCN, Andrés Rodríguez.