Los proyectos para legalizar el aborto llegarían al recinto de Diputados el miércoles 13 de junio, sólo un día antes del inicio del mundial de fútbol, que siempre logra distraer la atención de la opinión pública.

El cronograma se decidió en el medio de una nueva audiencia en Diputados, presidida por el macrista Daniel Lipovetzky, que venía evitando hablar de fechas para que no se le vaya el debate de las manos.

Pero accedió a un pedido de la radical Brenda Austin, preocupada por la interminable lista de oradores.

Las audiencias terminarán el jueves 31 de mayo y el 5 de junio se debatirá un dictamen. El plan es tratarlo el miércoles 13 de junio, un día antes del inicio del mundial de fútbol. 

"Queremos terminar las audiencias el 31 de mayo, debatir luego en comisiones el 5 y tratar el proyecto la semana del 13", le respondió su correligionaria Alejandra Martínez, presidente de la Comisión de Familia.

Lipovetzky ratificó el itinerario y aclaró que si es necesario sumará audiencias para no llegar al mes que viene sin dictamen. "Tenemos que tratar el proyecto antes del mundial", solicitó Araceli Ferreyra del Movimiento Evita.

Los detractores del aborto no se mostraron interesadas en acelerar demasiado, pero no se esforzaron por evitarlo.

La puntana Ivana Bianchi, activa militante contra la ley, sólo pidió no dejar afuera a los oradores; y la macrista Carmen Polledo explicó que algunos expositores vienen desde lejos y no se los puede apurar.

El 5 y el 7 de junio los diputados de las cuatro comisiones del plenario (Legislación General, Legislación Penal, Salud y Familia) definirán un dictamen entre los 9 proyectos presentados.

Como anticipó LPO, los diputados que promueven la ley debaten textos alternativos para captar indecisos. El escenario está abierto y los que apoyan el aborto creen que pueden llegar a una mayoría en el recinto con abstenciones y ausencias. Su plan es ganar la opinión pública en las audiencias que restan. 

Ayer exhibieron un video de los actores y este jueves la estrella de la audiencia fue la vedette Florencia de la V, que relató la muerte de su madre por un aborto clandestino, cuando ella sólo tenía 2 años.

"Me crié creyendo que mi madre había muerto por una enfermedad, y a los 14 años, una de sus hermanas me dijo: Tu mamá no murió por una enfermedad. Murió por un aborto ilegal. Murió desangrada". 

"Desde que me enteré busqué la cara del femicida que mató a mi mamá. Y hoy se quién fue: fue el Estado. En sus manos está la responsabilidad, si quieren tenerlas llenas de sangre, si quieren seguir cargando con la muerte de millones de argentinas por abortos clandestinos", desafió la actriz. 

La periodista Ingrid Beck, fue otra de las defensoras del aborto legal. "La práctica clandestina de abortos nos afecta a todas. Muchas mujeres pudieron sobrevivir porque tuvieron suerte. Aunque quienes pertenecen a sectores vulnerables corren más riesgos", señaló.

"Los mitos y tabúes que rodean al tema del aborto habilitan a que se niegue una atención médica y se criminalice a personas que garantizamos ese derecho. Se requiere la legalización del aborto para que no se vea como un acto heroico lo que hacemos algunas", aportó Estrella Perramón, médica del Hospital Sub zonal El Maitén.

Fue el día de los invitados de Francia, donde el aborto es legal desde hace 4 décadas y suma detractores y promotores por igual.

"Llegamos a un punto en que los poderes públicos no pueden cerrar los ojos ante un problema que existe y es de toda la sociedad. El Estado no debe evadir su responsabilidad y el Congreso tampoco puede mantener una legislación represiva que condena a las mujeres estigmatizándolas. En Francia, con la legalización se reemplazaron abortos clandestinos por abortos legales y seguros", se jactó Paula Forteza, franco-argentina, diputada en el país galo y Politóloga.

Pronto le respondió Segolen Du Closel, docente e investigadora de la UCA y la USAL, residente en Argentina hace 3 años: "En Francia, actualmente, uno de cada cinco franceses es abortado. Detrás de esta ley que despenaliza el aborto, está el fundamento del pacto social democrático. El aborto debe ser la última salida en situaciones especiales".

Entre los que se oponen hubo mucha academia y nulas caras conocidas. Se destacó el constitucionalista Gregorio Badeni: "Si queremos vivir en un estado de derecho, empecemos por cumplir lo que establece nuestra legislación en este tema. El niño por nacer tiene derechos".

"La Argentina no tiene ninguna obligación legal a nivel internacional para legalizar el aborto", señaló Ignacio de Casas, abogado, con Master en Derechos Humanos Universidad de Oxford.

"Estas audiencias son una oportunidad para considerar la vulnerabilidad de las madres. Este proyecto de ley no hace más que agravar la situación de la mujer. Su implementación nos va a dejar un país más injusto y más débil", agregó Gabriel Maino, de la UCA.

"Tenemos que generar criterios inclusivos que promuevan salvar las dos vidas. Les propongo redefinir el desafío para evaluar los proyectos que priorizan ese criterio", señaló Héctor Rocha, investigador del Conicet.