La polémica por la designación del abogado José Console como el representante de la querella del Gobierno en el juicio por encubrimiento en el atentado a la AMIA, que disparó un conflicto entre Germán Garavano y Elisa Carrió, sumó un nuevo capítulo con su expulsión del proceso.

Console fue apartado este jueves de la querella del Ministerio de Justicia por el Tribunal Oral Federal 2 (TOF2), que lleva adelante el juicio, por una presunta "incompatibilidad" de funciones.

Console había sido designado a último momento por Garavano para la lectura del alegato acusatorio de esa querella, en una maniobra que tuvo como objetivo retirar la acusación contra los ex fiscales José Barbaccia y Eamon Mullen, a quienes los otros abogados querían acusar.

En su pronunciamiento, el tribunal, por mayoría, resolvió girar lo actuado al Consejo de la Magistratura porteño y al Colegio Público de Abogados de la Capital para que analice la conducta de Console.

El letrado había sido impugnado por las demás querellas en el juicio, alegando que Console cumplía funciones "incompatibles" a raíz de su desempeño en el Consejo de la Magistratura de la Ciudad de Buenos Aires.

Por ese motivo, se dispuso "apartarlo de su rol como patrocinante del ministerio de Justicia", y "dejar sin efecto" su actuación en el juicio, aunque su polémico alegato fue validado por el TOF.

La argumentación fue que el Ministerio de Justicia estaba representado por otro abogado adjunto querellante cuya designación databa del 26 de marzo de 2017, por lo que se resolvió "aceptar el alegato" de la cartera que conduce Garavano.

De todos modos, el Ministerio de Justicia hizo saber que apelará la medida contra Console, que fue vinculado con el operador macrista Daniel Angelici, ya que es secretario de la Comisión de Disciplina de Boca Juniors, el club que preside el "Tano".

La jugada de Garavano con Console le había costado una crisis interna en Cambiemos y una dura crítica de Carrió. La Coalición Cívica además retiró de la Unidad AMIA a Mariana Stillman, una abogada de confianza de Lilita. "No formamos parte ni del amiguismo, ni del nepotismo, ni de encubrimiento judicial alguno", indicó la CC.

Como reveló LPO, tras la crítica pública Carrió empezó a buscar consenso con los radicales para intentar desplazar a Garavano. La diputada le propuso a Mario Negri y otros legisladores radicales hacer una defensa corporativa del titular de la Unidad AMIA, Mario Cimadevilla. 

Incluso trascendió la posibilidad de un juicio político contra el ministro. "Es un problema de la doctora Carrió. Puede pedir mi juicio político. Cualquiera puede pedirlo cuando quiera", la desafió Garavano. Luego ratificó el pedido de absolución de Barbaccia y Mullen.