Adolfo RodrÃguez Saá renunció al interbloque federal, un combinado de peronistas y partidos provinciales que fuera la tercera fuerza del Senado en tiempos de kirchnerismo y pero ya está pronto a desaparecer.
La secretarÃa parlamentaria del Senado recibió formalmente la renuncia al interbloque del puntano y su coterránea MarÃa Eugenia Catalfamo, con quien permanecerá en el bloque Justicialista por San Luis.
Y aunque no se incorporó formalmente a otro interbloque, en las últimas sesiones del año se lo vio coordinar todos sus movimientos con Cristina Kirchner. Se sientan al lado, pasillo de por medio, hablan todo el tiempo, votan juntos y la ex presidenta llegó a reivindicar su default.
Sin los puntanos, los federales son 5 miembros sin interacción entre ellos van camino a la extinción. En su origen el sello fue una contención para peronistas enfrentados al kirchnerismo a la que sumaron fuerzas provinciales, siempre con libertad de acción.
Con Cambiemos casi perdió sentido, excepto para pelear lugares en comisiones o autoridades de la Cámara, una compulsa de poroteos entre los jefes de bancada.
De hecho, RodrÃguez Saá es aún vicepresidente segundo de la Cámara del Senado por la fuerza del interbloque que ahora abandona. Quedarán seguirá integrado por Guillermo Pereyra, Lucila Crexell (Movimiento Popular Neuquino), el santafesino Carlos Reutemann (Santa Fe Federal y aliado del PRO) y los salteños Juan Carlos Romero (Justicialista 8 de Octubre) y Cristina Fiore Viñuales (Pares, cercana a Juan Manuel Urtubey).
Son menos que los 8 de Unidad Ciudadana, el bloque de Cristina, que seguramente reclamará el cupo de RodrÃguez Saá para alguien de los suyos.
En las comisiones conformadas en diciembre, Gabriela Michetti le reconoció el lugar de tercera fuerza a los cristinistas con dos vocalÃas en cada una y sólo una para los "federales".
No asà en la bicameral de trámite legislativo, encargada de tratar los decretos, donde los lÃderes de Cambiemos sólo le dieron un lugar al kirchnerismo y maniobraron para que Fiore Viñuales ocupe el lugar de RodrÃguez Saá.
Ayer la salteña les votó en contra, pero ni aún asà logró saldar la herida del puntano. En el oficialismo creen que tarde o temprano, se alejará de la intransigencia del ex presidente. Es lo que buscan.
Por favor no corte ni pegue en la web nuestras notas, tiene la posibilidad de redistribuirlas usando nuestras herramientas.
- 108/02/1821:10SON UN LUJO PARA LA POLITICA MUNDIAL