El intendente de Olavarría, Ezequiel Galli, mantiene distancia de los decretos de Mauricio Macri y María Eugenia Vidal que prohíben que sus ministros designen familiares en el Estado.

Galli, a diferencias de otros intendentes de Cambiemos que se sumaron a la iniciativa, tiene claros motivos para evitar la medida antinepotismo. Nada menos que unos 18 funcionarios del gobierno son familiares -directos e indirectos- del alcalde oficialista.

Según pudo saber LPO, su esposa Florencia Barbieri tiene un cargo de auditora de PAMI; su suegro Omar Barbieri es asesor del municipio.

En tanto, su tío, Eduardo Galli también es asesor y antes había ocupado el cargo de secretario de Deportes. En tanto, su primo Hilario Galli es subsecretario de Gobierno. Ayer, Hilario se burlaba en Twitter del decreto de Vidal y de las repercusiones que podría tener los casos de nepostismo en Olavarría: "Esperá que salgamos campeones y meto tapa en Clarín", haciendo referencia a clubes locales.

Otro de sus primos, Agustín Galli es subsecretario de Deportes. En tanto, la señora de Agustín Galli es la titular de la Dirección de Género.

Su prima, Mariana Galli, ocupa un cargo en la Dirección de Psicología del hospital municipal. El esposo de Mariana Galli es el encargado del depósito del mismo hospital.

El listado sigue. Otra prima del intendente: Viviana Sneider, tiene a cargo la Dirección de Enfermería. El esposo de Sneider es subdirector de Bromatología. Quien está al frente del área de Bromatología es la prima de la esposa de Galli, Paola Milessi.

Luciano Blanco, es subsecretario de Legal y Técnica, y también es familiar del intendente. La esposa de Blanco, Mariana Diamanti, es secretaria de Salud. También son familiares el director Administrativo del Hospital, Alexis Armanini. Su esposa es directora de Sistemas del municipio.

Gastón Acosta, quien fuera secretario de Hacienda y hombre cercano a Galli, también llenó el gabinete de familiares. Su esposa Guadalupe Araujo es Subsecretaria de Relaciones Internacionales. Su hermana, Lucrecia Acosta, es directora de Casa de Olavarria en la ciudad de Buenos Aires. En tanto, Guadalupe Acosta es la locutora oficial del municipio.

Estos cargos complican a Galli para avanzar en un decreto similar al que firmaron algunos intendentes, tanto oficialistas como opositores. Diego Valenzuela (Tres de Febrero) fue el primero en sumarse. Le siguió el peronista Ariel Sujarchuk (Escobar) y más tarde hizo lo propio Julio Garro (La Plata).

Quien dio el puntapié inicial fue Macri quien decidió prohibir por decreto a los ministros la posibilidad de nombrar a familiares en el Estado. Al día siguiente Vidal, en la provincia de Buenos Aires, definió adherir a la medida.