Pragmático, el establishment brasileño da la espalda a los candidatos tradicionales y se focaliza en el ex militar Jair Messias Bolsonaro que viene creciendo fuerte en las encuestas y asoma como herramienta para derrotar a Luiz Inacio 'Lula' Da Silva.

Las expectativas de los sectores más influyentes de Brasil estaban puestas en el ministro de Hacienda, Henrique Mierelles; en el gobernador de San Pablo, Geraldo Alckmin y el alcalde de esa ciudad, Joao Doria. Sin embargo, los sondeos mandan.

La consultora brasileña Ibope publicó en los últimos días un sondeo actualizado sobre la intención de voto para las presidenciales del año próximo. Lula da Silva (PT) lidera con un 35% las preferencias de los electores. Lo persiguen Bolsonaro (PSC), con 13%, y Marina Silva (Rede), con 8%.

Si los comicios fueran hoy, Bolsonaro -el candidato más polémico de la historia reciente brasileña- competiría contra Lula en segunda vuelta. En tanto, en un escenario electoral sin el ex presidente, quien podría ser inhabilitado por la Justicia, Bolsonaro aparece empatado con Silva en 15%.

Aunque diputado desde 1991, Bolsonaro proviene de la carrera militar. Llegó a ser capitán del Ejército y saltó a la política partidaria a fines de los 80, luego que un tribunal militar lo absorlviera por un caso de sabotaje que le había costado su expulsión de la fuerza.

De cara a la elección del año próximo, Lula viene recorriendo el interior de Brasil. Mientras tanto, Bolsonaro mantuvo contactos con inversores en Nueva York. El nexo es el banquero Gerald Brant, de la firma de inversiones Stonehaven.

Además tiene en agenda una gira por España, Italia, Corea y Japón para conversar con inversores. Para marzo del año próximo quiere volver a Estados Unidos.

El ex militar busca dejar en claro su perfil económico. Habla de un Estado mínimo, eficiente y libre de corrupción. Y hasta se muestra a favor de las privatizaciones.

De estilo controvertido, en 1999, en una entrevista defendió los cuestionamientos hacia el ex presidente Fernando Henrique Cardoso por privatizar la minera Vale y la empresa de telecomunicaciones, Telebrás. Ahora, como pre candidato a la presidencia hasta acepta evaluar modelos alternativos de privatización de Petrobrás.

En áreas como energía y defensa, Bolsonaro propone que el gobierno mantenga acciones de las empresas con poderes especiales. La llamada 'acción de oro'.

Polémico y controvertido, sus declaraciones siempre fueron noticia. Llegó a decir que los negros "ya no sirven ni para procrear" y que él "sería incapaz de amar a un hijo homosexual", que las mujeres deben ganar menos dinero "porque se embarazan y pasan seis meses de vacaciones" y que el "gran error" de la última dictadura "fue torturar y no matar".

Ese tipo de declaraciones, sumado a un eficaz uso de las redes sociales lo llevaron a un nivel de conocimiento que muchos políticos tradicionales desearían.