La venta de SanCor entró en su etapa final y multinacional neozelandesa Fonterra aparece como la candidata ideal para el gobierno que meses atrás hizo un último aporte de 450 millones y no está dispuesto a seguir desembolsando dinero para mantenerla a flote.
Fonterra ofrece unos u$s 300 millones para quedarse con la láctea, en una operación que incluye revertir la venta de su exitosa lÃnea de frescos, tal como permite una de las cláusulas que se firmó en esa operación. Luego una vez en control de la compañÃa santafesina, aportarÃa otros u$s 200 millones para modernizarla.
Al inicio de las negociaciones SanCor pedÃa u$s 600 millones, una cifra que el mercado consideraba un "disparate". Además era necesario que se transformara en una Sociedad Anónima, proceso que ya encaró.
El gobierno de Macri, que a través de Gustavo Lopetegui y Mario Quintana, supervisa la operación, habÃa congelado el desenlace hasta después de las elecciones. Por eso, ahora el proceso tomó velocidad.
Se suma a esto que la crisis en SanCor se sigue agravando. La empresa sufrió además un golpe anÃmico por la feroz derrota que sufrió el socialismo santafesino, que salió tercero con un 14,6% de los votos detrás del PJ (25,8%) y de Cambiemos (37,7%).
El candidato fue el ministro de la Producción, Luis Contigiani, un permanente defensor de la cooperativa, aunque en el gobierno de Macri lo ningunean: "Se la pasa hablando de SanCor pero la provincia no puso ni un peso para ayudarla".
Pero lo cierto es que el problema de SanCor no es polÃtico, sino financiero y muy grave. El crédito blando de $ 450 millones que le otorgó el gobierno a través del Ministerio de la Producción en mayo pasado vino muy bien, pero esos fondos ya se gastaron en el pago de salarios atrasados y deudas con tamberos.
Es más desde que se aprobó el crédito, siguieron rebotando pagos de la cooperativa: el 15 de agosto se depositaron 34 cheques sin fondos por un monto de 949.528, según registros del Banco Central (BCRA).
Hasta esa fecha, SanCor llevaba librados cheques sin fondos por más de $ 1.000 millones, de los cuales alrededor de un 30% fueron levantados con nuevos cheques de pago diferido (se habla además de una deuda de $ 53 millones con bancos privados).
Ahora, para salir de la urgencia mientras esperan cerrar la venta, en SanCor estudian vender Arla Foods una excelente empresa de suero ubicada en MartÃnez, provincia de Buenos Aires.
La cooperativa si bien fue pésimamente gestionada, tiene activos muy interesantes. Entre estos no ocupan un lugar menos los dos centros de distribución de punta, uno en la provincia de Buenos Aires cerca de la Panamericana y otro en Córdoba.
Por eso, hay tantos interesados. Un fondo de inversión de Estados Unidos,
la francesa Lactalis y la mexicana Lala, también manifestaron interés.
Pero la opción más viable serÃa la venta a la neocelandesa dado que también es una cooperativa y está muy bien posicionada a nivel mundial. Para el gobierno de Macri además la operación les permitirÃa mostrar que grandes capitales internacionales vuelven a invertir en la economÃa real de la Argentina, un proceso que marcha a un ritmo mucho más lento del que esperaba la actual administración.
El tema es que, Fonterra está exigiendo una reestructuración más profunda antes de hacerse cargo de SanCor en función de la cantidad de empleados (más de 4 mil), los sueldos ($ 72.000 en promedio) y los polémicos aportes voluntarios al Sindicato Atilra, un tema que el gobierno empezó a solucionar.
