El gobierno nacional incluyó en el proyecto de ley de Presupuesto 2018, un artículo por el cual se obliga al Banco Nación (BNA), a transferir al Tesoro 20.000 millones de pesos, al tiempo que modifica la carta orgánica de la entidad.

El artículo 89 de la iniciativa puntualiza "Redúcese en pesos veinte mil millones ($ 20.000.000.000) el capital social del Banco de la Nación Argentina y transfiérase esa suma al Tesoro Nacional. Encomiéndase al Directorio de la mencionada entidad que adopte las medidas necesarias para cumplir con la transferencia ordenada y realizar las adecuaciones societarias pertinentes".

La operación hace acordar al manotazo de las reservas del Banco Central que instrumentó en su momento Néstor Kirchner y que obligaron a Martín Redrado a dejar la entidad y ocurre cuando se suman cada vez más voces para alertar sobre el impresionante problema del déficit, que el Gobierno no parece dispuesto a enfrentar en toda su magnitud.

Para poder concretar la maniobra, fue necesario incluso cambiar la carta orgánica del Banco en su artículo 5°, el cual quedará redactado de la siguiente forma: "Artículo 5º.- De las utilidades líquidas y realizadas que resulten al cierre del ejercicio una vez efectuadas las amortizaciones y deducidos los castigos provisionales y previsionales que el Directorio juzgue conveniente, se destinará: el porcentaje que fije la autoridad competente para el fondo de reserva legal; el porcentaje que establezca el Directorio, que no podrá superar el venite por ciento (20 %), al Tesoro nacional; y el remanente a aumentar el capital y a los demás fines que determine el Directorio". 

En su momento se dijo en el mercado que en rigor Carlos Melconian fue obligado a renunciar porque se negaba a seguir asistiendo al Tesoro a niveles que ponían en riesgo los parámetros técnicos del Banco.