El gobernador Miguel Lifschitz encabezó un acto de presentación de la propuesta de liquidación de la deuda por fondos coparticipables que le fueron retenidos a Santa Fe indebidamente desde el 2006 y que un fallo de la Corte Suprema obligó al gobierno Nacional a cancelarla.

Pasado más de un año y medio sin ninguna respuesta a la decisión judicial, el socialista le encargó a Hacienda de la provincia elaborar una propuesta "que ayude y no nos obligue a ir a un nuevo litigio sino que permita a través del diálogo encontrar una solución razonable" afirmó el mandatario y recordó que "el fallo de la Corte obliga a satisfacer la demanda de los santafesinos".

En medio de la campaña, el socialista logró reunir a intendentes, jefes comunales, diputados y legisladores provinciales de todos los colores a quienes agradeció "acudir a esta convocatoria que hacemos para defender los interesas de la provincia de Santa Fe".

Según comentaron por lo bajo dirigentes del socialismo a LPO, Lifschitz se hartó de darle vueltas al asunto y de reuniones que no terminaban de abordar una solución práctica a la deuda, decidió elevar una propuesta concreta.

De esta manera, y con los plazos de la Corte vencidos, el gobierno de Santa Fe decidió insistir en el acuerdo entre partes y no optar por la liquidación del juicio y negociar el monto y la modalidad de pago en señal de diálogo con el gobierno nacional.

Según detalló el ministro de Economía, Gonzalo Saglione, en primer lugar se deberá definir el monto de la deuda que calculan mediante la aplicación de la tasa activa del Banco de la Nación Argentina bajo la modalidad sumada, es decir, sin capitalizar alcanza los 50 mil millones de pesos.

De acuerdo a la propuesta presentada, se sugiere una transferencia de $ 15.000 millones en 24 cuotas mensuales, iguales y consecutivas de $ 625 millones, aplicando la tasa Badlar sobre el saldo, con vencimiento de la primera cuota en enero de 2018.

El resto, con la emisión y entrega de títulos públicos nacionales con alto volumen de circulación a 40 años por un monto de $ 34.840 millones, admitiéndose nuevas emisiones similares.

De esta manera, confían en que el Ministerio de Economía reconocerá a la propuesta como razonable ya que el monto anual de los desembolsos significan el 0,32 por ciento de los Gastos Totales previstos en el Presupuesto 2017 de la Administración Nacional mientras que la suma en títulos públicos representa el 0.80 % del stock de deuda pública neta a diciembre del 2016.

En cuanto a la afectación de los recursos recibidos por parte de la provincia, el casi 14 por ciento será coparticipable a municipios y comunas, lo que explica la especial atención de los intendentes que se hicieron presentes en el acto.

Por el neto de la transferencia que le corresponde a la provincia deberán ser afectados a gastos de capital, esto es en obras pública y adquisición de bienes y equipamiento y el fortalecimiento de programas como el Fondo Municipal de Inversiones como el lanzamiento de nuevas líneas de crédito para Pymes.

Tibio apoyo de Cambiemos

Como era de esperar, quienes mostraron mayores reservas a la iniciativa de Lifschitz fueron los dirigentes de Cambiemos. Aunque la presentación contó con la asistencia de algunos referentes macristas, consideraron que fue una estrategia política electoral del gobernador.

"Estamos en campaña electoral. No es el momento indicado para plantear eso", dijo José Corral sin mayores rodeos a medios locales. En diálogo con La Política Online, el primer candidato Albor "Nicky" Cantard fue mucho más medido aunque no evadió suspicacias.

"Me llama la atención que en años anteriores hubo silencio y ahora este tema toma un grado de virulencia que sorprende", disparó Cantard, quien consideró que "el gobierno de Lifschitz está recibiendo la totalidad de coparticipación y partidas de obras públicas que no tuvieron en los últimos 12 años".

A su vez, señaló que en este último año y medio de gobierno de Cambiemos, Santa Fe ya recibió 12 mil quinientos millones de pesos de coparticipación al percibir el 15 por ciento que el fallo de la Corte restituyó.

"Si bien fue una deuda contraída por desidia y torpeza del gobierno anterior, la propuesta se estudiará y analizará para luego dar una respuesta o presentar una contrapropuesta", concluyó Cantard.