El acuerdo entre el Gobierno y la CGT por Ganancias anunciado este lunes pateó para adelante un tema central: Cual será finalmente el costo fiscal de la reforma.  Un tema que estará muy presente en la reunión que este martes tendrá el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, con los gobernadores.

El problema es que hasta hoy no había una estimación clara del costo del acuerdo que sellaron entre Daer, Acuña y Schmidt y Triaca, Frigerio y Quintana. Tanto en la oposición como en el oficialismo los equipos técnicos pasaron la tarde haciendo números y estimaciones del costo preliminar de sacar a 400 mil trabajadores y corregir las escalas entre un 177% y 300%.

Hasta ahora, por las exenciones y deducciones en la oposición consideran que con los datos del día, el costo del nuevo proyecto no bajará de los $60.000 millones. Se basan en que, por el lado de la reducción de las percepciones tributarias, el nuevo proyecto está más cerca del de la oposición; y, por el lado de los nuevos impuestos, Frigerio negó que el Gobierno esté dispuesto a ampliar la presión fiscal ni a poner impuestos distorsivos como los que viene objetando a la renta financiera y a la minería.

Desde el oficialismo explicaron a LPO que el costo del nuevo proyecto será de “Un poquito más de lo que está en el proyecto original” y señalaron que mañana van a proponer tanto a las Provincias como a los jefes de bloque de cada partido en Diputados una serie de impuestos para achicar el costo. La idea es dejarlo tan debajo de los $40.000 millones como sea posible gracias a “un impuesto al juego que significará una recaudación de seis a siete mil millones de pesos y otros impuestos que rinden menos”.

Así, entre lo que estiman en el Ejecutivo y los cálculos de la oposición, hay al menos $20.000 millones, que serán los que se discutan centavo a centavo mañana entre los gobernadores y en la Cámara Baja.

Pero estas diferencias no son novedad. Ya para los primeros proyectos que llegaron al Congreso oficialismo y oposición se cruzaron con acusaciones de costos fiscales inflados y desinflados llevando agua cada uno para su molino.

LPO

El primer proyecto de Ganancias presentado por el Gobierno era fiel a los $27.000 millones de costo fiscal neto previsto por la Ley de Presupuesto, pero implicaba para el grueso del os trabajadores alcanzados por el impuesto una rebaja promedio de $200. Esto enfureció a los gremios y le abrió la cancha al proyecto de Ganancias de la oposición, a la vez que dejó a Prat Gay fuera de la discusión por su falta de tino político.

El primer proyecto de la oposición, según estimó la consultora Economía y Regiones en base a los números de la AFIP, tenía un costo neto de $91.273 millones, de los cuales más de la mitad (51,8%) impacta sobre las finanzas de las provincias y de la Ciudad de Buenos Aires.

“Mientras el proyecto oficial tiene un costo en la recaudación de Ganancias de $49.550 millones, el de la oposición asciende a $132.541 millones. Tomando en cuenta los impuestos creados para compensar parte de estas pérdidas, en el proyecto oficial, el impuesto al Juego recaudaría $8.969 millones, y la recaudación de IVA aumentaría $8.563 millones por mayor consumo. En tanto, en el proyecto de la oposición, los nuevos impuestos aportarían $16.859 millones y por mayor consumo, la recaudación de IVA aumentaría en $24.409 millones. Compensando estos montos, el costo neto del proyecto oficial asciende a $32.018 millones y el de la oposición a $91.273 millones”, precisó la consultora.

Costo fiscal estimado por E&R para cada nivel de gobierno según ambos proyectos. En millones de pesos pic.twitter.com/y3Q1GYDG0M— Economia y Regiones (@eyr_economia) 19 de diciembre de 2016

Los $32.000 millones, explicaron desde la consultora a LPO, tuvo que ver con una primera relajación de la restricción de los $27.000 millones producto de una rebaja más agresiva en el impuesto a las Ganancias parcialmente compensado por una recaudación estimada en su momento en $9.000 por un nuevo impuesto al juego. Ahora ese número ya es un tercio menor.

Desde la oposición desmienten los números de la AFIP y señalan que, producto de los nuevos impuestos, el costo fiscal del proyecto que tuvo media sanción en Diputados y fue atajado en comisión en Senadores es en verdad de $65.000 millones y no de los $91.300 millones que señala el oficialismo.

Ahora frente al nuevo principio de acuerdo conciliado por el Ejecutivo y la CGT, se reeditan estas diferencias, con una salvedad: unos y otros abren el paraguas y aclaran que los números son estimativos porque aun falta negociar con los gobernadores el costo fiscal.