Diputados
Quintana cajoneó la ley de Carrió para combatir los monopolios
La chaqueña había pedido cárcel para los carterizadores. Suavizó el proyecto pero no se trató.

En un año que termina con inflación récord, en el Congreso quedaron cajoneados los proyectos para controlar los precios y sancionar las prácticas monopólicas, entre ellos el de Elisa Carrió, ignorado por el Gobierno y los diputados de Cambiemos.

Como relató LPO, en pleno pico inflacionario la chaqueña presentó una iniciativa que proponía sancionar con prisión a los empresarios por abuso de precios.

Apuntaba a los supermercados, dueños de un oligopolio capaz de regular a gusto el valor de los alimentos en las góndolas.

Su propuesta encendió la alarma en el Gobierno y obligó a una rápida intervención del ascendente Mario Quintana, el coordinador económico encargado de supervisar el vínculo con el empresariado.

Quintana me hizo entender que es mucho más democrático no mandar a presión a los empresarios, dijo Carrió para justificar la moderación de su proyecto antimonopolios, que el vicejefe de Gabinete igual logró cajonear.

Quintana convenció a Carrió de suavizar su proyecto y junto al ministro de Producción Francisco Cabrera y Emilio Monzó anunciaron uno nuevo en Diputados, donde Lilita mencionó a Franco Macri y Héctor Magnetto entre los beneficiarios de monopolios. Ya no los amenazaba con cárcel, sino con un Tribunal de la Competencia que en el peor de los casos pueda multarlos. 

“Quintana me hizo entender que es mucho más democrático no mandar a prisión a los empresarios. El problema está en la cartelización y eso se evita con la magnitud de la multa. Tiene que haber una cadena razonable. La intermediación no se puede llevar el 80% de un producto”, explicó la chaqueña ese día.

Sin embargo, en estos meses Carrió no quiso o no pudo activar su proyecto en las comisiones, donde las autoridades de su bloque ni siquiera levantaron la voz para exigir su tratamiento.

Ni siquiera Mario Negri, jefe del interbloque Cambiemos y autor de otro proyecto sobre control de precios, archivado tras la aparición triunfal de Lilita.

Quintana cajoneó la ley de Carrió para combatir los monopolios

Según supo LPO, Fernando Sánchez, histórica mano derecha de la chaqueña, deambuló por la Comisión de Defensa de Usuarios y Consumidores pidiendo consenso, pero sus pares de Cambiemos no se mostraron muy entusiasmados.

Tenía un problema: el vice segundo de esa Comisión es Pablo Torello, hermano de José, jefe de asesores del Gobierno y mano derecha de Macri. Cada vez que le preguntan la posición oficial sobre un tema, el diputado Torello dice que debe consultar a su hermano.

“Sánchez negociaba con (el diputado de La Cámpora Juan) Cabandié, pero en su bloque nadie está interesado en el tema”, se sorprendían algunos diputados opositores, a la espera de una bajada de línea del Gobierno sobre un tema presentado por medio Gabinete e ignorado por Cambiemos.

Quintana apeló a Pablo Torello, diputado y hermano del asesor presidencial José Torello, para adormecer la iniciativa de Carrió, que además Macri excluyó del temario de iniciativas a tratar en las extraordinarias.

Pero Quintana, con su pasividad, fue más efectivo que Macri en calmar a Carrió: consiguió que no volviera a hablar de control de precios, ni siquiera cuando el Presidente excluyó el proyecto del plan de sesiones extraordinarias. O sea, al menos hasta marzo, los empresarios podrán subir precios sin presión del Congreso.

El proyecto, en tanto, sólo fue presentado en papel en una reunión de asesores y LPO tuvo acceso. Prohíbe “acuerdos entre competidores, concentraciones económicas ilícitas” o cualquier práctica que logre “limitar, restringir, falsear o distorsionar la competencia o el acceso al mercado o que constituyan abuso de una posición dominante en un mercado”.

Y planea multas diarias de hasta “un 0.3% del volumen de negocios” generados por la empresa” o de hasta 200 millones de pesos. Como había pedido el coordinador de Gabinete, se establece un “sistema de clemencia” para empresarios monopólicos arrepentidos.

Carrió propone además un rígido control de las fusiones y adquisiciones, poco oportuna en momentos en que el Gobierno promueve sociedades de inversión para reactivar la economía, incluso, exceptuándolos del pago de Ganancias.

Y crea la Autoridad Nacional de la Competencia con una Secretaría de Concentraciones Económicas y una Subsecretaria de Fomento de la Competencia.

La chaqueña intercambió editoriales con el diario La Nación cuando propuso encarcelar a los remarcadores, pero tras la visita de Quintana a Diputados no volvió a hablar del tema. Aceptó obediente que su proyecto no fuera tomado en cuenta por ningún compañero de bloque. Y menos por el Gobierno. 

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  • 1
    04/12/16
    14:36
    Todo el mundo sabe que los monopolios y oligopolios son grandes contribuidores al enorme "costo argentino". Pero acá solo hablamos del "costo argentino" pero nada mas, nos hacemos los dolobus terriblemente. ¿poooorrr?
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