
Mauricio Macri se prepara para firmar un decreto clave para el sector de las telecomunicaciones. La medida se viene demorando hace algunas semanas en parte por la feroz guerra de lobbys sobre el Presidente. Es que tras las ventajas que recibieron a principios de año cuando se dinamitaron las leyes de Medios y Argentina Digital, las empresas no se conformaron y siguen presionando a la Rosada por nuevos beneficios.
Los dos actores principales de la disputa son Telefónica y el Grupo Clarín, los gigantes del mercado de telecomunicaciones local. En un segundo plano aparecen otras empresas de cable como la de Vila-Manzano, Supercanal, y la de Alberto Pierri, Telecentro, que resisten el desembarco de las telefónicas.
En el caso de Telefónica, la empresa de capitales españoles está en una ofensiva muy fuerte para que Macri les permita dar televisión por cable desde el 1º de enero de 2018. El decreto que dinamitó la ley de Medios le dio facultad al Poder Ejecutivo para que extienda un año más ese plazo. Pero el objetivo mayor es que el Gobierno les permita brindar el servicio por satélite (incluso pretenden hacerlo con la red de Arsat), una opción muchísimo menos costosa y compleja que desplegar una red como las que tienen los cables. LPO reveló hace algunos meses que Macri estaría dispuesto a cumplirle el deseo.
Claro que quienes se oponen fuertemente a esta habilitación son los cables, empezando por Cablevisión, el mayor actor del mercado. La empresa del Grupo Clarín pretende que las telefónicas recién puedan ingresar en 2019, pero desarrollando su propia red. En tanto, Supercanal y Telecentro directamente le pidieron a la Rosada que el plazo para permitirles el ingreso se extienda no uno sino cinco años más.
Quien trabaja a tiempo completo para que Macri nos escuche a las empresas de cable y les anticipe el ingreso a la TV por cable es José Luis Rodríguez Zarco, el responsable de relaciones institucionales de Telefónica. Hombre cercano a Daniel Scioli, Rodríguez Zarco fue uno de los principales lobbystas contra las leyes que el kirchnerismo impuso en el sector.
La pelea de Telefónica y Clarín tiene otro ríspido capítulo, que el holding local intentará destrabar con el esperado decreto de Macri. Se trata de una habilitación para que Nextel, adquirida el año pasado por 170 millones de dólares por Cablevisión, pueda brindar telefonía 4G, un permiso que el Gobierno le traba desde hace varios meses.
Nextel no participó de la subasta del espectro de 4G que hizo el kirchnerismo, pero consiguió frecuencia con la compra de cinco empresas de telecomunicaciones durante el año, por las que habría pagado unos 150 millones de dólares en total.
El Grupo Clarín pretende realizar una operación conocida como refarming, que en pocas palabras es una reutilización de las frecuencias. Es que esas frecuencias que Nextel consiguió de las empresas que compró están destinadas a otro tipo de servicios. Para poder dar 4G con esas bandas, Nextel necesita la autorización del Gobierno, que espera desde hace varios meses.
En el multimedios creen que detrás de esa “demora” hay un exitoso lobby de Telefónica en la Secretaría de Comunicaciones. Esa oficina es dirigida por Héctor Huici, un hombre cercano a Federico Pinedo y al abogado José Sánchez Elía, el lobbysta en jefe de las telefónicas en el Gobierno y el poder en las sombras en la cartera de Comunicaciones. Como explicó LPO, Sánchez Elía está detrás de la presión para que Macri abra el mercado satelital, del que forma parte porque es CEO de Tesacom, una firma asociada a grandes actores del mercado. El siguiente paso sería que las telefónicas puedan utilizar la tecnología satelital.
Esta traba a Nextel tensionó la relación de Macri y Clarín, que ya le reprocha haber perdido un año (y unos 350 millones de dólares de inversión) para intentar reflotar la empresa, que con una tecnología absolutamente obsoleta sigue perdiendo mercado frente a Movistar, Personal y Claro. Del 3% que se consideraba que controlaba el año pasado, sólo tendría ahora un 1%. Conseguir la habilitación del 4G parece ser su única alternativa.
Ante esto, Clarín también reclama que el Gobierno impulse la aparición del cuarto operador del mercado de telefonía móvil, una figura que vendría a romper la cartelización de los tres grandes actores. En otros países, se les brindó a los nuevos operadores ventajas económicas por un determinado período para que puedan hacer pie en el mercado y quebrar la cartelización. Esto se hizo por ejemplo en México, donde Peña Nieto impulsó el ingreso de nuevos jugadores y logró que el costo del servicio bajara drásticamente, al punto que pasó de ser una de los más caros de América Latina a más barato que en Argentina.
Quien trata de hacer equilibrio en esta pelea es el ministro de Comunicaciones, Oscar Aguad, muy cercano a Clarín. Pero el cordobés no quiere dar un paso en falso porque sabe que detrás de la resistencia de Huici y Sánchez Elía está también Macri.
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JAJAJAJAJA!!!!
La ultima que se les ocurrió es aumentar el 100% la tarifa de transporte... pero en febrero para que la gente no proteste por que esta de vacaciones!! están locos ya venimos de un aumento del 100% hace menos de un año eso pega directo en la inflación.
Pero como se piensan que la gente es boluda lo van a disfrazar de innovación... van a implementar que dentro de una hora los viajes en tren y colectivo (subte no por que son la elite) el segundo viaje te descuentan el 40% y el tercero el 70%
Claro esto por que ya analizaron y vieron que la gente que entra dentro de esa regla es ínfima la mayoría tiene una hora y media de viaje y el descuento no es tal por que antes te aumentaron un 100% la tarifa
Y como ademas no entienden nada pretenden que el descuento lo soporten los colectiveros que cuando se enteren van a poner el grito en el cielo y se va a caer el descuento pero no el aumento... en síntesis pobre patria mía