La presentación de la diputada federal Inés Parra contra Ariadna Montiel en la FiscalÃa General por supuesto desfalco es asumida en Palacio Nacional como un estiletazo de Marcelo Ebrard a la polÃtica social del Gobierno ya que se da por descontado que la legisladora opera por indicación del ex canciller.
La denuncia, observan en el entorno presidencial, tiene problemas serios porque va contra Montiel pero se ubica temporalmente en años en los que la actual secretaria era diputada federal. La denuncia retrata cuestiones del 2018 pero Montiel llegó a la SecretarÃa del Bienestar en 2022, como reemplazo de Javier May.
Ebrard no abandona su retórica de un presunto desvÃo de recursos en favor de la campaña de Sheinbaum pero de momento Andrés Manuel López Obrador no se confronta con el ex canciller. Y es que la contienda se desarrolla en otros ámbitos.
Sucede algo similar al conflicto entre el Gobierno y el empresario Ricardo Salinas Pliego por los libros de texto. El presidente no ataca al dueño de TV Azteca pero esta semana se dedicó en su conferencia a embestir contra el ministro de la Corte Luis MarÃa Aguilar que tiene en su ponencia un expediente crucial para el destino del litigio que Salinas Pliego tiene con el SAT.
López Obrador mantiene su foco en el resultado de las encuestas y de momento la directriz de Palacio hacia gobernadores y alcaldes es acelerar la operación polÃtica en favor de Sheinbaum.
El mandato de que la que viene es una elección de Estado es tan potente que alcanza a lo ocurrido ayer miércoles en Tabasco, donde Adán Augusto López Hernández fue retratado dándole un codazo a una mujer que participaba de su mitin. Un nuevo golpe a una campaña muy lastimada.
Este despliegue explica, por cierto, que ya hay tres gobernadores que se ven en un eventual gabinete, como son los casos de Cuitláhuac GarcÃa, Layda Sansores o Américo Villarreal.
Hasta el momento de la encuesta Ebrard tendrá opción de asegurar la unidad y acordar. Si ataca el resultado final, el ex canciller iniciará un sendero de difÃcil retorno. Asà se lo habrÃa comunicado Andrés López Beltrán.
En las últimas horas Alfonso Durazo ha trazado en privado algunos ribetes de lo que sucede en la cúpula. El ex canciller le pide al presidente que cumpla un acuerdo antiguo entre ambos, generado en la previa al 2018, mientras que el presidente le responde que respete la encuesta de Morena, sostenga la unidad y que se perfile hacia el 2030.
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