Al ser nombrado titular de la Secretaría de Educación Pública de la administración de Claudia Sheinbaum, el todavía dirigente morenista Mario Delgado recibió varias muestra de hostilidad de distintos sectores. Para empezar, la disidencia magisterial concentrada en la CNTE.

De inmediato, para salir del paso, Delgado Carrillo organizó una reunión con el secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Alfonso Cepeda Salas, con la presencia de los dirigentes de las secciones sindicales de todo el país.

Hizo también que el diputado federal de Morena, Azael Santiago Chepi, ex líder de la Sección 22 de la CNTE en Oaxaca reconociera el trabajo legislativo de Delgado en 2019, cuando se eliminó la Reforma Educativa de Enrique Peña Nieto, pese a que en 2013 el entonces senador por el PRD la promovió junto al empresario Claudio X. González.

En el otro extremo, en el sector empresarial con inversiones en la educación, también hubo muestras contra el nuevo titular de la SEP, no por la figura de Mario Delgado sino por las encomiendas de Claudia Sheinbaum; entre ellas, la desaparición la prueba Comipems.

La Comisión Metropolitana de Instituciones Públicas de Educación Media Superior es una institución que organiza anualmente un concurso para que los estudiantes puedan ingresar a las instituciones públicas de bachillerato en la Ciudad de México y el Estado de México. Su eliminación fue una promesa de campaña de Sheinbaum y Clara Brugada, hoy ratificada.

Delgado será el nuevo titular de la SEP y confirma que desaparecerá los exámenes para las preparatorias

Para los inversores en educación no es una buena noticia, porque la prueba que se aplica desde 1996 dinamiza la solicitudes de ingreso en escuelas privadas a nivel bachillerato y acelera la movilidad social, mientras que sin su uso todos los jóvenes que aspiren a una preparatoria tienen el derecho a ingresar a un plantel público. Esa es la propuesta de la 4T: educación pública y gratuita para todos.

Organizaciones como México Evalúa, expertos como Alfonso Zárate y políticos de oposición como el priista Aurelio Nuño han manifestado su rechazo a la medida, y en consecuencia al nombramiento de Mario Delgado como un operador eficiente de la 4T que cumple los objetivos que se comandan. Así, para casi todos, la Comipems desaparecerá.  

Según pudo saber esta redacción, Delgado estaría preparando el escenario para la eliminación del examen de ingreso al bachillerato acudiendo a la asesoría del rector de la Universidad Nacional, Leonardo Lomelí, un economista bien visto entre los empresarios del sector y un viejo amigo del morenista desde los tiempos en que su ex esposa trabaja en el equipo de Lomelí Vanegas.

Se trata de la economista Sofía López, quien formaba parte de los especialistas de quienes se rodeó el hoy rector de la UNAM para la realización de diferentes papers bajo contrato de empresas, o incluso bancos. Tanto López Mendoza como Lomelí podrían ser el vaso comunicante con aquellos empresarios que rechazaron el nombramiento de Mario Delgado.

Valga recordar que la economista Sofía López es actualmente directora de Círculo Editorial Azteca de Ricardo Salinas Pliego, y desde al menos 2004 mantiene una relación laboral con Grupo Salinas y la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, donde se concentran alguno de quienes no recibieron con agrado los cambios en la SEP.