El tema migratorio vuleve a tensar las conversaciones bilaterales. Ahora Andrés Manuel López Obrador criticó duramente la nueva orden del gobierno estadounidense para reforzar el muro fronterizo, previo a su encuentro con la comitiva de funcionarios de ese país encabezada por el secretario de Estado, Antony Blinken.

Durante su conferencia matutina de este jueves consideró que la orden que dio ayer el gobierno de Joe Biden, que es un giro en la postura que hasta ahora habían asumido, se explica por la presión que está ejerciendo un grupo de republicanos, en víspera del proceso electoral.

"Entiendo que hay fuertes presiones de los grupos políticos de extrema derecha en Estados Unidos, sobre todo los que quieren aprovechar el fenómeno migratorio, el consumo de las drogas, con propósitos electorales. Hay mucha politiquería cuando se acercan las elecciones", dijo el presidente.

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López Obrador es apresuró a señalar que el presidente Biden "siempre va a contar con nuestro apoyo", sin embargo, criticó duramente que "la autorización para la construcción del muro es un retroceso, porque eso no resuelve el problema", dijo.

"No se trata de estar reteniendo con barreras, con muros. Yo creo que vamos a tratar este asunto", dijo el presidente previo al diálogo de Alto Nivel de este jueves. Aunque dijo que abordará con más amplitud el tema con la prensa el día de mañana, en tanto que hoy dio una conferencia más breve para poderse encontrar con la comitiva estadounidense.

El presidente insistió que la única manera de tratar el tema migratorio es atendiendo las causas, "no se trata de estar reteniendo con barreras, con muros", enfatizando también que esta medida es contraria a lo que hasta ahora había establecido su homólogo en EU, reconociendo que, hasta el momento, es el único presidente que no ha ampliado la barda entre la frontera de ambos países.

Ayer, Biden ordenó el "reforzamiento inmediato" en las principales zonas fronterizas donde ocurren cruces irregulares -es decir, sin documentos-, por ejemplo, en varias zonas del valle del río Bravo, lo que incluirá barreras físicas y vías para detener la entrada de las personas migrantes.

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La medida se toma en medio de incrementos sin procedentes, como calificó la propia Organización Internacional para las Migraciones (OIM), de los flujos migratorios que viajan del centro y sur al norte del continente, particularmente Estados Unidos.

El desplazamiento de miles de personas responde a situaciones cada vez más complicadas en materia política, económica y social en sus países de origen, pero desde agosto en particular se han visto incrementos en el número de personas que buscan cruzar la frontera norte de México. Este incremento está relacionado con la urgencia de las personas de lograr este objetivo ante el temor de que incrementen las medidas antimigrantes y también por una serie de rumores que se atribuyen al crimen organizado para alentar más el tránsito.